La sabiduría libra de adulterio y fornicación.

La sabiduría te librará de la mujer que engaña a su esposo, y también te engaña a ti con sus dulces mentiras; de esa mujer que se olvida de su promesa ante Dios. El que se mete con ella puede darse por muerto. ¡El que se mete con ella ya no vuelve a la vida! Querido jovencito, tú sigue por el buen camino y haz siempre lo correcto, porque sólo habitarán la tierra y permanecerán en ella los que siempre hagan lo bueno. En cambio, esos malvados, en los que no se puede confiar, serán destruidos por completo. Proverbios 2: 16-22

Desde la década del sesenta, con la introducción de la cultura hippie, con el mal llamado “amor libre”, la sociedad occidental comenzó a deteriorarse moralmente.

Vivimos en una sociedad que va desechando y perdiendo los valores morales, al no querer aceptar los límites naturales que rodean al matrimonio y la familia, instituciones formadas por Dios el Creador.

La fornicación y el adulterio es algo que ya no se considera malo en la sociedad, al contrario, se acepta como algo natural. La fornicación entre los jóvenes no es mal visto, el consejo de algunos padres o amigos de la familia, solo se reduce a “cuídate, usa protección” para evitar una enfermedad, o un embarazo. Sin embargo, ante la mirada de Dios, eso es pecado, está mal, destruye vida ese tipo de práctica. Dice la biblia; el cuerpo no es para que lo usemos en relaciones sexuales prohibidas. 1 Corintio 6:12 en adelante.

El adulterio es nocivo porque destruye matrimonio, familias y hogares dejando un sin fin de problemas afectivos y emocionales, provocando mucho daño en las personas involucradas.

Dice un proverbio; El que se enreda con la mujer de otro comete la peor estupidez: busca golpes, encuentra vergüenzas, ¡y acaba perdiendo la vida!

Es normal que las personas busquemos vivir bien, y también disfrutar de los placeres de la vida. Pero es imperioso que sepamos diferenciar los buenos y sanos placeres, de aquellos placeres que por más que nos atraiga y guste, son destructivos para la vida personal y familiar.

Por lo tanto se necesita de la sabiduría para no caer en esa trampa, y no tener después que lamentar cuando ya es tarde, por haber andado en ese camino equivocado.

Es cierto que con arrepentimiento se puede salir, pero las consecuencias sin dudas las sufrirán. Por eso es mejor pensar antes de tomar cualquier decisión, para no equivocarse y así evitar sufrimiento innecesario.

Los abraza en Cristo. P. Sosa.