jueves, 30 de noviembre de 2023

Comenzando un nuevo mes con la mirada puesta en los acontecimientos del fin.

Dijo el Señor Jesús;  ¡Arrepiéntanse y crean las buenas nuevas!

Arrepentirse ¿Qué es?

Desde el comienzo mismo de la humanidad, Dios llama al arrepentimiento al ser humano. Es la proclama central del mensaje de Juan el Bautista, lo predicó Jesús y también lo hicieron los apóstoles. Es el corazón del Evangelio de Jesucristo.

Me pregunto; ¿Por qué ahora en este tiempo, ya no se habla de arrepentirse, para creer en el evangelio? ¿Por qué se eliminó de las prédicas y de los llamados a la salvación? Sin embargo, Dios no ha desechado esa palabra ni el llamado. Es más, ahora manda que se arrepientan. El apóstol Pablo, estando en Atenas al ver tanta idolatría, como pasa hoy en nuestra sociedad, declara lo siguiente;

Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan. Hechos 17:30

¿De qué ignorancia está hablando el apóstol Pablo?

De la ignorancia de no saber o no querer reconocer, que a Dios no se le puede representar con ningún objeto hecho por el ser humano, eso la biblia llama idolatría, y a Dios le desagrada. Como también le desagrada la inmoralidad, una conducta corrupta, una actitud incrédula, palabras soeces y acciones violentas. Eso también está instalado en nuestra sociedad, por lo tanto requiere de arrepentimiento para salir de esa situación destructiva, que afecta a la persona y las relaciones humanas. Todo lo malo que se hace o lo bueno que no se hace delante de Dios es pecado, y de ese pecado, hay que arrepentirse. Dios es tres veces Santo. Y sin santidad, nadie verá al Señor.

La Biblia es clara en esto; sin arrepentimiento no hay perdón de pecados.

Si hay algo que no figura en el pensamiento del ser humano actualmente, es arrepentirse de las cosas malas que hace. Todo tiene su justificación, ¡eso es lo triste!

No reconoce nada, y reconocer es el primer paso para el arrepentimiento.

Arrepentirse, viene del griego, Metanoia, y cuyo significado es; Cambio de actitud, cambio de modo de pensar, cambio de plan de vida.

De ahí la importancia de arrepentirse para que haya un cambio, en la vida personal y colectiva, de otra manera es imposible. ¿Qué debemos hacer? Es la pregunta que surgió de parte de los oyentes de la predicación de Pedro. Arrepiéntase y bautícese cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados, les contestó Pedro, y recibirán el don del Espíritu Santo. Hechos 2:37-39

También hoy, continúa la misma respuesta para cada persona que entiende que necesita del perdón de Dios, para comenzar una nueva vida. Una vida con propósito, donde a pesar de los inconvenientes que surjan, puede continuar hasta lograr aquello que se propuso, sin perder el gozo y la paz interior. ¡Una vida con frutos dignos de arrepentimiento!

Los abraza en Cristo. P. Sosa. 

 

miércoles, 29 de noviembre de 2023

Se acerca el Gran Día ¡Estemos alerta!

Pero acerca de los tiempos y de las ocasiones, no tenéis necesidad, hermanos, de que yo os escriba. Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche; que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán.

Más vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os sorprenda como ladrón. Porque todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas. Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios.

Pues los que duermen, de noche duermen, y los que se embriagan, de noche se embriagan. Pero nosotros, que somos del día, seamos sobrios, habiéndonos vestido con la coraza de fe y de amor, y con la esperanza de salvación como yelmo.

Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo, quien murió por nosotros para que ya sea que velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él. Por lo cual, animaos unos a otros, y edificaos unos a otros, así como lo hacéis. 1 Tesalonicenses 5

En este pasaje de las Sagradas Escrituras, el apóstol Pablo está llamando a la reflexión a un grupo de creyentes, sobre el arrebatamiento de la iglesia, la segunda venida de Cristo y los acontecimientos de los últimos tiempos. Algo que Pablo ya había enseñado, pero que por algún motivo estaba siendo mal interpretado, causando algunos problemas espirituales y de entendimiento entre los hermanos en la fe.

En el presente, también nos exhorta a nosotros a estar enfocados en las Sagradas Escrituras con respecto a estos temas, dejando que el Espíritu de Dios nos de entendimiento, para no estar confundidos, ni distraídos, sabiendo quienes somos, en quien estamos, y cuál es el propósito de nuestra vida aquí y ahora.

De esta manera estaremos seguros y atentos a los acontecimientos actuales, esperando por nuestra salvación, manteniendo firme la fe y la esperanza en nuestro Señor Jesucristo, quien pago por nosotros el precio de nuestra redención, y que viene a buscarnos para que estemos siempre con él, librándonos de los juicios que vienen sobre los moradores de la tierra.

Los abraza en Cristo. P. Sosa.

 

lunes, 27 de noviembre de 2023

¡En Dios está mi esperanza!

El año está terminando, ya no queda mucho tiempo,

Las noticias no son buenas, en todo el mundo, problemas,

Tormentas, inundaciones, terremotos y volcanes,

Tempestades y violencia, dictadores y asesinos,

La vida, muy complicada, solo se vive el momento.

 

Esta triste realidad golpea fuerte el presente,

Las personas pasan hambre, injusticias y miserias,

Los gobiernos hacen promesas, que nunca van a cumplir,

Tal vez no quieran hacerlo, son promesas nada más,

Para llegar al poder, y desde allí dominar.

 

Hoy quiero hacer un balance, para saber con certeza,

Si hubo pérdida o ganancia, de los momentos vividos,

¿Cómo invertí yo mí tiempo? ¿De qué cosas me ocupé?

¿Ayudé al necesitado? ¿Defendí una causa justa?

¡Con Dios siempre hay esperanza para un futuro mejor!

PS

 

domingo, 26 de noviembre de 2023

En este tiempo de incertidumbre económica.

¿Cuál es esa riqueza que nos trajo Jesús?

Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto. Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición; porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores. 1 Timoteo 6:8-10

Hay que hacer la diferencia, esto no es apología de la pobreza, sino que hace énfasis en estar contentos y agradecidos disfrutando con gozo lo que se tiene. Solamente una persona agradecida, generosa y rica puede hacerlo, no quien acumula riquezas, porque acumular riquezas produce avaricia, egoísmo e insatisfacción personal.

Ser una persona rica comienza por lo interior, esto escribió el apóstol Juan; Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma. Pues mucho me regocijé cuando vinieron los hermanos y dieron testimonio de tu verdad, de cómo andas en la verdad. No tengo yo mayor gozo que este, el oír que mis hijos andan en la verdad. 3 Juan 1

La persona rica es aquella que tiene un corazón bondadoso, lleno de misericordia y compasión. Es una persona que siempre está dispuesta para los demás, aun cuando le hayan fallado o calumniado. Una persona que aparentemente no tiene nada, pero lo posee todo. Que piensa en lo que pueda estar necesitando el prójimo, antes que pensar en sus propias necesidades. Esa actitud nunca permite que el egoísmo entre a su corazón, sino que con toda generosidad está dispuesta a darse a sí mismo, para luego continuar ayudando al que necesita. Sabiendo que ayudar, no siempre es dar cosas materiales, porque lo más importante es darse, estar cerca del que necesita, esto lleva a una búsqueda de comunión diaria con Dios, quien se encarga de suplir todas las necesidades, conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.

Esto es un vivo ejemplo que estamos siguiendo las pisadas del Maestro por excelencia, Jesús, quien se dio a sí mismo en rescate por todos, entregando su propia vida por nosotros, aun cuando éramos enemigos de Dios por causa del pecado que había en nuestras vidas. Sin embargo eso no fue un impedimento para su gran acto de amor.

Los abraza en Cristo. P. Sosa. 

 

viernes, 24 de noviembre de 2023

¡Hay que recuperar el amor por Dios y el prójimo!

Un intérprete de la ley, preguntó a Jesús por tentarle, diciendo: Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley? Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas. Mateo 22:35-40

Parece ser que esta conversación que tuvieron los religiosos con Jesús, para muchos es irrelevante. Sin embargo no es así, porque, aun cuando esta pregunta surge de una manera tramposa, Jesús le da con su respuesta sabia, una profundidad y una trascendencia gloriosa. Ahí Dios por medio de la palabra dicha por Jesús, ¡Está sentando la base firme para una convivencia sana y constructiva en la vida personal y social del ser humano, y es atemporal, o sea que trasciende todas las épocas y culturas humanas!  Sin embargo, amar a Dios y amar al prójimo es algo que se ha ido descartando de a poco en el diario vivir de las personas en todas las épocas, y que ahora se manifiesta mucho más.

Es tiempo de volver a replantearse ¿Cuánto amo a Dios? ¿Cuánto amo al prójimo? ¿Cuánto se cree de lo que está escrito en la Biblia? ¿Cuánto se cree en las enseñanzas de Jesús? Se sabe mucho, se conoce mucho, se comparte mucho, pero, ¡Se cree muy poco!

Algunos se preguntarán ¿Por qué digo esto? Le respondo, viendo tanta violencia, tanta maldad en el ser humano, tanta hipocresía, tanto odio manifiesto, tanta insensibilidad hacia los más débiles y los que menos tienen, tanta corrupción, tanto egoísmo, que aún las instituciones religiosas y las organizaciones sociales no escapan a esta contaminación moral que nos afecta, a tal punto que la palabra amor se confunde con erotismo, ha sido distorsionada para que cambie su significado.

Esto causa mucha tristeza y afecta la vida de las personas que quieren un buen vivir, aquellas que han elegido una vida donde la educación, el respeto, la responsabilidad y el buen comportamiento, sea moneda corriente. Anhelamos una sociedad donde se valore la vida antes que las cosas materiales o inanimadas, donde los valores y principios cristianos ocupen ese lugar de importancia dentro de la sociedad. Una sociedad donde se vuelva a creer en el verdadero amor, como dicen Las Sagradas Escrituras; El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, más se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor nunca deja de ser. 1 Corintios 13

Para esto es necesario volver a Dios, porque, DIOS es AMOR.

Los abraza en Cristo. P. Sosa.

miércoles, 22 de noviembre de 2023

Iglesia de Cristo somos ¡Libres de la ira venidera!

Y cómo os convertisteis de los ídolos a Dios, para servir al Dios vivo y verdadero, y esperar de los cielos a su Hijo, al cual resucitó de los muertos, a Jesús, quien nos libra de la ira venidera. 1 Tesalonicenses 1:10

Las Sagradas Escrituras nos hablan y enseñan mucho sobre los últimos tiempos, con el propósito de que no ignoremos los acontecimientos que están ocurriendo en el mundo. Por la palabra escrita de Dios, sabemos que estamos en los últimos tiempos, por lo tanto no debemos descuidar las enseñanzas bíblicas, que nos advierten de los terribles juicios que vendrán sobre la tierra, para todos aquellos que rechazaron la gracia del perdón de Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.

Pero la iglesia de Cristo tiene esta promesa de parte del Amado. ¡Cristo viene por su iglesia! Para sacarla de este mundo antes que comience el tiempo de la ira, pero hay que entender que, viene por su Iglesia, no por los que van a la “iglesia” a cumplir y ganarse el cielo, no por los que pelean por un cargo en el templo, sino por todos aquellos que hemos sido lavados en la sangre del Cordero, siendo justificados por la fe delante de Dios, siendo adoptados por él como hijos.  

Justificados por gracia y libres de toda condenación delante de Dios.

Puesto que Dios ya nos ha hecho justos gracias a la fe, tenemos paz con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo. Pues por Cristo hemos podido acercarnos a Dios por medio de la fe, para gozar de su favor, y estamos firmes, y nos gloriamos con la esperanza de tener parte en la gloria de Dios. Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos de los sufrimientos; porque sabemos que el sufrimiento nos da firmeza para soportar, y esta firmeza nos permite salir aprobados, y el salir aprobados nos llena de esperanza. Y esta esperanza no nos defrauda, porque Dios ha llenado con su amor nuestro corazón por medio del Espíritu Santo que nos ha dado. Romanos 5

Por lo tanto amados hermanos en Cristo, no tengan temor de las cosas que están ocurriendo en el mundo, todo eso es necesario que suceda porque la palabra de Dios es fiel y verdadera. Pero nosotros tenemos puestos los ojos en Jesús, autor y consumador de la fe, no pertenecemos a este mundo, porque el mundo y sus deseos pasa, pero los que esperamos a Jesús, recibimos nuevas fuerzas. Nuestra ciudadanía está en el cielo, de donde también esperamos a nuestro Señor y Salvador Jesucristo, quien ¡Pronto viene!

Los abraza en Cristo. P. Sosa.