Porque ya conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor a vosotros se hizo pobre, siendo rico, para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos.
2 Corintios 8:9
¿Qué significa ser enriquecidos? ¿Quién es una persona rica? ¿Ser ricos es lo mismo que tener riquezas? Estas y otras varias preguntas seguramente vienen a su mente, cuando leen este pasaje bíblico.
Normalmente asociamos riqueza con mucho dinero y distintos bienes materiales, abultadas cuentas bancarias y tarjetas de créditos. Pero, ¿será a eso que se refiere el apóstol Pablo cuando escribió que, nuestro Señor Jesucristo siendo rico se hizo pobre, para que nosotros seamos enriquecidos?
Cuando escuchamos las enseñanzas de Jesús, él siempre advierte en contra de la avaricia humana, que amontona riquezas para sí.
Jesús les dijo: Miren, y guárdense de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee. También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho. Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos? Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes; y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate. Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será? Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios. Lucas 12:15-21
A la luz de este pasaje, las riquezas materiales son efímeras, terrenales, transitorias y no satisface el alma humana, y la persona cuando va a la eternidad, se va vacía, nada de esto le sirve, no se puede llevar nada. Sin embargo Jesús vino a enriquecernos.
¿Cuál es esa riqueza que nos trajo Jesús?
En este otro pasaje bíblico el apóstol Pablo dice; Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto. Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición; porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.
1 Timoteo 6:8-10
Hay que hacer la diferencia, esto no es apología de la pobreza, sino que hace énfasis en estar contentos y agradecidos con lo que se tiene. Solamente una persona agradecida, generosa y rica puede hacerlo, no quien acumula riquezas, porque acumular riquezas produce avaricia, egoísmo e insatisfacción personal.
Ser una persona rica comienza por lo interior, esto escribió el apóstol Juan; Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma. Pues mucho me regocijé cuando vinieron los hermanos y dieron testimonio de tu verdad, de cómo andas en la verdad. No tengo yo mayor gozo que este, el oír que mis hijos andan en la verdad. 3 Juan 1
La persona rica es aquella que tiene un corazón bondadoso, lleno y misericordia y compasión. Es una persona que siempre está dispuesta para los demás, aun cuando le hayan fallado o calumniado. Una persona que aparentemente no tiene nada, pero lo posee todo. Que piensa en lo que pueda estar necesitando el prójimo, antes que pensar en sus propias necesidades. Esa actitud nunca permite que el egoísmo entre a su corazón, sino que con toda generosidad está dispuesta a darse a sí mismo, para luego continuar ayudando al que necesita. Sabiendo que ayudar, no siempre es dar cosas materiales, porque lo más importante es darse, estar cerca del que necesita, esto lleva a una búsqueda de comunión diaria con Dios, quien se encarga de suplir todas las necesidades, conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.
Es un vivo ejemplo que está siguiendo las pisadas del Maestro por excelencia, quien se dio a sí mismo en rescate por todos, entregando su propia vida por nosotros, aun cuando éramos enemigos de Dios por causa del pecado que había en nuestras vidas. Sin embargo eso no fue un impedimento para su acto de amor.
Que tengan un feliz y bendecido fin de semana.
Los abraza en Cristo. P. Sosa.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario