miércoles, 17 de enero de 2024

Esta es la realidad que actualmente vivimos.

Pero el Espíritu dice claramente que en los últimos tiempos algunos renegarán de la fe, siguiendo a espíritus engañadores y enseñanzas que vienen de los demonios. Harán caso a gente hipócrita y mentirosa, cuya conciencia está marcada con el hierro de sus malas acciones. Esta gente prohíbe casarse y comer ciertos alimentos que Dios ha creado para que los creyentes y los que conocen la verdad los coman, dándole gracias. Pues todo lo que Dios ha creado es bueno; y nada debe ser rechazado si lo aceptamos dando gracias a Dios, porque la palabra de Dios y la oración lo hacen puro.

Enseña estas cosas a los hermanos, y serás un buen servidor de Cristo Jesús, un servidor alimentado con las palabras de la fe y de la buena enseñanza que has seguido. Pero no hagas caso de cuentos mundanos y tontos. Ejercítate en la piedad; pues aunque el ejercicio físico sirve para algo, la piedad es útil para todo, porque tiene promesas de vida para el presente y para el futuro. Esto es muy cierto, y todos deben creerlo.  Por eso mismo trabajamos y luchamos, porque hemos puesto nuestra esperanza en el Dios viviente, que es el Salvador de todos, especialmente de los que creen. Estas cosas tienes que mandar y enseñar. Evita que te desprecien por ser joven; más bien debes ser un ejemplo para los creyentes en tu modo de hablar y de portarte, y en amor, fe y pureza de vida. Mientras llego, dedícate a leer en público las Escrituras, a animar a los hermanos y a instruirlos. No descuides los dones que tienes y que Dios te concedió cuando, por inspiración profética, los ancianos de la iglesia te impusieron las manos. Pon tu cuidado y tu atención en estas cosas, para que todos puedan ver cómo adelantas. Ten cuidado de ti mismo y de lo que enseñas a otros, y sigue firme en todo. Si lo haces así, te salvarás a ti mismo y salvarás también a los que te escuchan. 1 Timoteo 4

¡Cuánta actualidad tiene esta advertencia bíblica! El sistema del mundo contaminado por el pecado, dice querer prevenir las enfermedades, la violencia familiar, la inseguridad social, la economía deficitaria, dictando normas y conductas de vida para las personas, que muchas veces resultan más nocivas que las cosas que quieren prevenir.

Las Sagradas Escrituras nos hacen ver claramente, que las cosas que llevan a las personas a apartarse de la fe, es por escuchar a espíritus engañadores y seguir enseñanzas de los demonios. Es por eso que se debe profundizar en la enseñanza bíblica, guiada por el Espíritu de verdad.  

El apóstol Pablo escribió; Porque el reino de Dios no es cuestión de comer o beber determinadas cosas, sino de vivir en justicia, paz y alegría por medio del Espíritu Santo. Romanos 14:17.

No interesa tanto la edad física que se tenga, para liderar una congregación o grupo de personas, lo importante es la madurez espiritual y el crecimiento que se tenga en Cristo. Cuando la persona que está al frente de una congregación o lidera un grupo, entiende y acepta en su vida esto que la biblia enseña, sin duda alguna que también enseñará lo mismo a las personas que están bajo su responsabilidad. Esto hará que sea un fiel servidor de Cristo Jesús, alimentado y alimentando con la palabra de la fe, para seguir creciendo en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y salvador Jesucristo, quien con su sangre nos redimió. El Señor por medio de su Espíritu Santo, nos ayude a permanecer fieles en el llamado que tenemos, para no escuchar ni enseñar un evangelio diferente que proviene del enemigo de nuestras almas.

Los abraza en Cristo. P. Sosa.

 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario