martes, 31 de julio de 2018

Corrección


Independencia Argentina



El nueve de Julio, celebramos el aniversario de la Independencia Nacional, algo muy caro al sentimiento argentino. Es el recuerdo de haber dejado de ser colonia española, de que otros tomen decisiones por nosotros, lo cual fue necesario para el crecimiento de la joven nación.
Es el tiempo donde se debe aprender a pensar como país, cuando todos son necesarios y valiosos, aportando ideas y mano de obra, para realizar aquello que se considera importante y necesario para el desarrollo nacional.
Es el momento de cultivar el sentimiento nacional, lo que se llama patriotismo, donde se deja de lado los intereses mezquinos, y se piensa en el bien común. Tiempo en el cual se renuncia al egoísmo de querer acumular. Fortalecer el crecimiento de los pequeños emprendimientos industriales, que irán dando forma a la soberanía nacional, generando recursos genuinos, cultivando el suelo argentino para dar bienestar al hermano necesitado.

Son más de doscientos años de independencia que estamos celebrando.
¿Hemos aprendido el patriotismo? ¿Se piensa como nación, o todavía existe el pensamiento egoísta?
Debemos reconocer que Dios, nos ha dado una porción del territorio mundial, con muchísima riquezas, con recursos inagotables, para que la nación toda la disfrute, y no que sean solamente algunos los privilegiados. Un país donde los recursos naturales son para todos, pues pertenece al Creador que le ha placido darnos a nosotros los argentinos.
Un país donde no debería existir la pobreza, si se utilizaran esos recursos correctamente, siendo sabio y compasivo con los que menos tienen. Es tiempo de reflexión.

Nunca más actual los versos del Martín Fierro que dice: Los hermanos sean unidos, porque esa es la ley primera, haya unión verdadera en cualquier tiempo que sea, porque si entre ellos pelean, los devoran los de afuera.

Por lo tanto, necesitamos detenernos un momento, mirar el camino recorrido y ver como lo hemos hecho.
Como nación ¿estamos haciendo las cosas bien? Podemos decir que se practica la justicia, que se contribuye al bien nacional. Cuando se dictan leyes son para beneficiar al bien común, o son leyes que se ajustan a ciertos sectores solamente.
Como nación que se autodenomina cristiana, no se debe tener miedo de recurrir a la Biblia para saber lo que Dios tiene para decirnos como personas, con respecto a estos temas sociales tan complejos que atravesamos. Él es la fuente de toda Razón y Justicia que necesitan consultar los gobernantes de turno, para encausar esta hermosa Argentina que nos tocó vivir.
El sabio Salomón escribió en el libro de proverbios lo siguiente;
La Justicia engrandece a la nación. Mas el pecado es afrenta para las naciones. Proverbio 14: 34 (Reina-Valera)
El orgullo de un pueblo es que se haga justicia; la desgracia de los pueblos es que se cometa pecado. Proverbio 14:34 (Biblia lenguaje actual)

Esto no es religión, son principios que deben regir los pueblos si se quiere progresar, no se necesitan nuevas leyes, sino reconocer la única ley que es universal, atemporal y transcultural, que no envejece, no tiene falla, no necesita ser actualizada y es para todos.
La ley de Dios es perfecta, que convierte el alma. El testimonio de Dios es fiel, que hace sabio al sencillo. Salmo 19:7 (Reina- Valera)
La ley de Dios es perfecta, y nos da nueva vida. Sus mandatos son dignos de confianza, pues dan sabiduría a los jóvenes. Salmo 19:7 (Biblia Lenguaje Actual)
Debemos celebrar la fiesta de la independencia, con esto en mente. Ser independiente, no significa que seamos libres.
Jesús dijo; Si ustedes permanecen en mi palabra, serán verdaderamente mis discípulos; y conocerán la verdad, y la verdad les hará libres.
Juan 8:31-32 (Reina- Valera)
Jesús les dijo a los que habían creído en él: Si ustedes obedecen mis enseñanzas, serán verdaderamente mis discípulos;  y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.
Juan 8:31-32(Biblia Lenguaje Actual)

Bendiciones.  Pastor Sosa

miércoles, 25 de julio de 2018

¿Quién es mi líder?




Pero no seguirían a un desconocido; más bien huirían de él, pues no reconocerían su voz. Juan 10:5
Los seres humanos normalmente, buscan tener un líder. Alguien que les inspire confianza, alguien que admiren, alguien a quien quieren imitar y a quien siguen sin condiciones. Acuden a él cuando aparece alguna necesidad o dificultad que deban resolver.
Eso ocurre y ocurrió en todas las épocas, a nivel personal, comunitario, y nacional e incluso en el plano espiritual.
Cuando una persona o sociedad, se ve afligida por algún tipo de sometimiento físico, territorial, emocional o espiritual que no le permite hacer uso de las libertades existentes, busca un líder.
Es cierto que muchas veces los líderes que surgen espontáneamente, no siempre son ejemplo a seguir, pues tienen actitudes difíciles y conductas poco claras. Eso produce desánimo, frustración y desconcierto.
Eso no debe ser un impedimento para continuar en la búsqueda de un líder o liderazgo sano y comprometido con el bien común.
Como personas creadas por un Dios amoroso y compasivo, necesitamos acudir a él, para ser guiados y conducidos a una vida sana y con propósito, pero necesitamos de un líder que nos conduzca en esa búsqueda de bienestar interior.
Existen hombres y mujeres capacitadas por Dios, para liderar a otros, conduciéndolos a un encuentro con Jesús, el verdadero líder.
En Las Sagradas Escrituras,  Jesús dijo; Sígueme. Marcos 2:14.
En otra oportunidad dijo; Vengan a mí, y yo les daré el descanso que ustedes necesitan, ese descanso para sus almas cansadas y agobiadas por los problemas cotidianos. Mateo 11:28
La Biblia recomienda, poner los ojos en Jesús el autor y consumador de la fe.
Este es mi Hijo amado, a él oíd. Mateo 17:5
Jesús el Cristo, es la persona digna de ser seguida, es un líder digno de imitar, pues nunca abandona a quienes deciden estar bajo su liderazgo, su promesa es; He aquí yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. Mateo 28:20
Pero debemos saber que es un líder exigente, alguien que desea la excelencia en todo y de todos.
Ese es el líder que cada persona necesita seguir.
Jesús dice; Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano.
Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre. Yo y el Padre uno somos.
Juan 10
Es mi deseo y oración a mi Dios, que cada persona en esta sociedad, puedan encontrar en Cristo, el Líder a seguir, es el único confiable ciento por ciento.
Bendiciones.  Pastor Sosa

Seguidores de Cristo




Todos aquellos que decimos que creemos y seguimos al Cristo resucitado, debemos pensar que nuestra vida debe reflejar eso, leemos en las Escrituras que; todo aquel que dice que permanece en Cristo, debe andar como Él anduvo. (1 Juan 2:6)
Nuestra conducta diaria debe diferenciarse de los que no profesan la fe en Cristo, pues ellos viven a su manera, en cambio nosotros debemos y tenemos que ser diferentes, las Sagradas Escrituras nos da la respuesta;  ¡Pero esto no es lo que ustedes aprendieron acerca de Cristo!  Porque ustedes oyeron el mensaje acerca de él, y saben vivir como él manda, siguiendo la verdad que él enseñó.  Por eso, ya no vivan ni se conduzcan como antes, cuando los malos deseos dirigían su manera de vivir.  Ustedes deben cambiar completamente su manera de pensar, y ser honestos y santos de verdad, como corresponde a personas que Dios ha vuelto a crear, para ser como él. (Efesios 4: 17-24)   
Esto nos confronta con una realidad diferente a lo que normalmente se dice, nos compromete a ser distinto al común de la gente y no tiene que ver con la religión, sino con una actitud de vida.
Por eso, ya no deben mentirse los unos a los otros. Todos nosotros somos miembros de un mismo cuerpo, así que digan siempre la verdad.  Si se enojan, no permitan que eso los haga pecar. El enojo no debe durarles todo el día,  ni deben darle al diablo oportunidad de tentarlos.  Quien antes fue ladrón, debe dejar de robar, y ahora trabajar bien y con sus propias manos. Así tendrá dinero para ayudar a las personas necesitadas.  No digan malas palabras. Al contrario, digan siempre cosas buenas, que ayuden a los demás a crecer espiritualmente, pues eso es muy necesario.
No hagan que se ponga triste el Espíritu Santo de Dios, que es como un sello de identidad que Dios puso en ustedes, para reconocerlos cuando llegue el día en que para siempre serán liberados del pecado.  Dejen de estar tristes y enojados. No griten ni insulten a los demás. Dejen de hacer el mal.  Por el contrario, sean buenos y compasivos los unos con los otros, y perdónense, así como Dios los perdonó a ustedes por medio de Cristo. (Efesios 4: 25-32) 
Cuan importante es esto que terminamos de leer, son los principios de vida que el evangelio de nuestro Señor Jesucristo nos propone, para que al incorporar en nuestro diario andar, marquemos un camino a seguir por todos aquellos que están cansados de un estilo de vida, que conduce al enfrentamiento inútil sobre cosas materiales y que no ayuda a la sana convivencia social, y eso hace que el mundo que vivimos se vuelva cada día más complicado y violento. Donde se prioriza los derechos más que las responsabilidades que cada uno tenemos y que por lo tanto eso hace que nos distanciemos unos de otros, porque espero del otro y no me ocupo de tomar la iniciativa.
Debemos recordar que Jesús nos enseña que; trate a los demás como me gustaría que me trataran a mí.
Todo esto como pueden apreciar, nada tiene que ver con una religión, sino más bien tiene relación directa con un estilo de vida fundamentada en las enseñanzas de Jesús el Cristo Hijo de Dios, quién vino a este mundo nacido de mujer, pero sin pecado, como una persona más, con las mismas limitaciones que nosotros, tuvo que ser amamantado, aprender a caminar, a comer, a hablar, a obedecer. Fue perseguido desde la cuna misma, tuvo que huir para que no lo mataran antes de tiempo, tuvo hambre, tuvo sed, se cansó, tuvo sueño a tal punto que se durmió en medio de una tormenta en el mar, fue traicionado, fue tentado por el diablo, pero nunca se le escuchó quejarse ni reclamar nada para Él, pero eso si lo vemos permanentemente ocupándose de la necesidad de los demás en lo físico, emocional y espiritual.
Por eso su vida terrena es un desafío para el ser humano, porque al pasar por todas las circunstancia que la vida le propuso, logró salir victorioso. ¿Cuál ha sido su secreto? Su continua dependencia de Dios el Padre celestial. Es lo que propone al ser humano si quiere tener una vida distinta, pero eso sí, tiene su costo que no es barato.
Fíjese que la Biblia relata que Jesús tuvo que aprender la obediencia  a través de sufrimiento, si él siendo sin pecado tuvo que sufrir para aprender a obedecer. ¡Cuánto más nosotros miserables pecadores! Pensemos que si estamos como estamos, no es porque no haya otra alternativa, sino porque nosotros, las personas, no queremos pagar el precio de aprender a obedecer.
Bendiciones. Pastor Sosa





Mujeres



Amadas mujeres, esposas, madres, y futuras madres.
Dicen Las Sagradas Escrituras, que la mujer tiene el privilegio de ser; coheredera de la gracia de la vida.
Al Señor Dios, le ha placido que sean ustedes en colaboración con el varón, el medio que Él utiliza, para multiplicar en este mundo la raza humana.
Por eso les invito por un momento a cerrar sus ojos físicos, para mirar con los ojos del alma. También cierren sus oídos físicos, y abran los oídos del corazón. Porque los ojos y oídos físicos, son muy limitados, y además muchas veces son insensibles.
En cambio los ojos del alma y los oídos del corazón, son diferente, aprecian mejor el valor de las personas y de los acontecimientos, no son prejuiciosos, tienen sensibilidades diferentes de los físicos.
¿Por qué les pido esto? Para que conversemos sobre este tema tan distorsionado y contradictorio, como es el ABORTO.
Ustedes, las mujeres, están continuamente siendo bombardeadas por los medios de comunicación masivas, y por las redes sociales con ideas y pensamientos equívocos, que no les permiten ser libres en su manera de pensar, ni de tomar decisiones correctas, en base a la educación y formación recibida en sus hogares. Pues le dan parte de la información que ustedes deben conocer, para tomar una decisión tan importante, una decisión que tiene que ver con la vida humana.
Además tener que abortar un embarazo, no es el problema, eso es la consecuencia. Tratar de solucionar una consecuencia, trae más problemas que solución.
Quedar embarazada, es consecuencia, de haber mantenido relaciones sexuales con un varón. De otra manera, ¡es imposible un embarazo no deseado! La única persona en el mundo que quedó embarazada sin haber tenido relación sexual con un varón, fue María la madre de Jesús, el Hijo de Dios.
Sin embargo las Sagradas Escrituras, no registran ningún pensamiento abortivo de parte de ella, eso que vivía en una época y una cultura donde, embarazarse siendo soltera, se castigaba con la pena de muerte, pues era evidente que había tenido relación sexual sin estar casada, (aunque no era su caso), pero ¡como explicaba el hecho!
Piensen en esto.
¿Quieren tener relaciones sexuales por placer, no para procrear? Está bien, es correcto, es normal, forma parte de nuestra naturaleza humana. ¡Es fantástico!
Recordemos que el sexo fue creado por Dios, con tres propósitos a saber; unitivo, placentero y procreativo. Es nuestra responsabilidad decidir con qué propósito vamos a tener la relación, por placer o para procrear. Ahí es donde radica el problema, si no se toma conciencia, que toda relación sexual, tiene riesgo de embarazo.
Por lo tanto, lo primero a definir es, el para qué, así pueden tomar los recaudos necesarios, para evitar el embarazo no deseado. También saber con quién va a tener esa relación, ¿es el esposo, novio, amigo, un desconocido? Ustedes son libres para hacerlo con quien quieran, pero lo correcto es con el esposo, Dios lo estableció así. En ese contexto no es difícil conversar sobre el tema, y ponerse de acuerdo en qué tipo de cuidado va a tener a la hora del placer sexual, para que no haya problema, y así poder disfrutar de esa relación.
Por otro lado, la mujer no es la única responsable de ese embarazo no deseado, hay responsabilidad compartida con el varón, ambos realizaron ese acto.
Es cierto que la que lleva la prueba en su cuerpo, es la mujer. Eso es muy fuerte para ella, porque se siente sola. ¿Dónde está el varón para contenerla? ¿Es indiferente al estado de angustia y desazón de la mujer? Si es soltera, ¿Cuál es la responsabilidad de los padres? Le dieron toda la información, acerca del sexo y sus riesgos al practicarlo sin responsabilidad.
Los varones, ¿Son responsables con las mujeres? ¿Están dispuestos a hacerse cargo de sus actos? Si la han embarazado. ¿Qué decisión toman?
Tener educación sexual, no solo es saber cómo se usa un preservativo, o como cuidarse para no contraer una enfermedad venérea o el sida. La educación sexual es mucho más que eso. Implica conocimiento del ser humano en su totalidad, cuando comienza y cuando termina una vida, conocer los principios y valores morales, que Dios el Creador, dispuso para el ser humano. Porque nos guste o no, creamos o no un día vamos a tener que dar cuenta de nuestros actos, conducta y hechos, al dador de la vida. Como la Biblia dice; Pues Dios juzgará toda obra, buena o mala, aun la realizada en secreto. (Eclesiastés 12:14
Y lo confirma la canción popular; la vida me ha prestado y tengo que devolverla, cuando el Creador, me llame para la entrega.
Amadas mujeres, ustedes son valiosas. No permitan que otros piensen por ustedes. No dejen que otros decidan por ustedes. No se dejen influenciar para el mal. No están solas. Tienen alguien que les ama sin condiciones. Alguien que puede y quiere ayudarlas en su toma de decisiones. Alguien que las respeta. Alguien que las conoce y sabe de sus necesidades. Alguien que, si ustedes le buscan y se ponen bajo su protección, nunca tendrán la necesidad de hacerse un aborto. Él les va a enseñar a ser felices, viviendo en medio de una sociedad que se va deteriorando cada día, pero que no les afectará a ustedes.
La persona de quien les estoy hablando, se llama Jesús de Nazaret, el Cristo de Dios, enviado a este mundo, con el propósito de sacar a las personas de su triste condición de estar separados de Dios, por causa del pecado que afecta las vidas, y que les lleva a estas conductas equívocas y pensamientos perversos y destructivos.
Ya no tendrán necesidad de hacer tomas de lugares, marchas de repudios ni exigir justicia, porque la persona que acepta y recibe a Cristo en su vida, es guardada y protegida por Él. Además les promete vida sana sin violencia de género y sin tener que entregarse al libertinaje sexual, para tener un poco de alegría y placer. Cristo dijo; Yo he venido para que tengan vida, y vida en abundancia.
Estas son las cosas que las personas deberían pensar, reflexionar, meditar para tomar las decisiones importantes de la vida, porque trascienden las culturas y perduran en el tiempo, afectando para bien a la humanidad.
Que el Dios creador del cielo y de la tierra, hacedor nuestro, les bendiga, les fortalezca y guarde sus corazones y pensamientos en Cristo, dándole de su gracia, para tomar decisiones sabias, maduras y correctas.  
Bendiciones. Pastor Sosa


Verde ¿color de esperanza?


Es tiempo que pensemos.
En la ironía de la vida.
No hace mucho tiempo se decía, “verde color de esperanza”.
Hoy ya no puedo decir lo mismo, han cambiado el paradigma de la frase.
¿Por qué? Me dirá usted.
Tristemente, hoy el color verde, que representa la vida, la alegría, un nuevo comienzo, que está asociado a la primavera, ya no lo es.
Este color, que traía esperanza. Hoy es sinónimo de destrucción, falta de compasión, muerte sin misericordia hacia los inocentes. Pero eso no es lo peor, lo peor es, que este color, convierte el vientre de una mujer, en un campo de exterminio. Donde cada persona por nacer que se encuentre en ese lugar,  está destinado a ser destruido sin contemplaciones.
Eso me produce mucha tristeza. Se toma la vida como si somos nosotros, los seres humanos, los dueños de la misma. Se discute con mucha soberbia, se actúa con necedad y se decide con liviandad.
Es llamativo la poca o nada convicción de nuestros legisladores, respecto al tema de la vida. Todos los argumentos de los que proponen el aborto legal, son válidos, eso no significa que sean correctos, justos o valederos, menos aún que sea representativo del pensamiento de la mayoría de los argentinos.
Reflexionemos por favor, argumentar es bueno, pero con fundamentos basados en la verdad. Legislar es necesario, pero para evitar problemas, no las consecuencias.

Por último, no se debe olvidar a Jesús el Cristo que dijo; Yo soy el que da la vida y el que hace que los muertos vuelvan a vivir. Quien pone su confianza en mí, aunque muera, vivirá.  Los que todavía viven y confían en mí, nunca morirán para siempre. ¿Puedes creer esto?

Esto pone al ser humano en la perspectiva correcta, no somos dueños de la vida, solamente somos administradores de la misma. Todo las decisiones que se deba tomar sobre ella, hay que consultar con el Dueño.
Él dice esto; ¡Pongan atención! ¡Yo vengo pronto! Y traigo el premio que le daré a cada persona, de acuerdo con lo que haya hecho.  Yo soy el principio y el fin, el primero y el último. Apocalipsis 22:12
Bendiciones. Pastor Sosa

La virgen María y el pueblo evangélico


Hay un concepto equivocado con respecto a la creencia del pueblo evangélico.
Se dice que no creemos en la virgen María y tampoco en los santos.
Esto es un error, porque si hay alguien que realmente cree en la virginidad de María, y en la santidad de los hombres y mujeres de Dios, es el creyente en Cristo Jesús.
Creemos y aceptamos lo que dicen las Sagradas Escrituras, que María estando comprometida con José y antes que tuvieran relaciones sexuales. Dios escoge a María, una de las tantas vírgenes de Israel, para que sea la madre de su Hijo Jesús, y ella, por un milagro del Altísimo es embarazada por el Espíritu Santo de Dios, único caso en la historia de la humanidad, que no se volverá a repetir.
Ella sin perder su virginidad, concibió sin la participación de ningún varón, porque el ser que nacería de ella debía ser sin pecado pues sería el redentor de la humanidad el Salvador del mundo.

Jesús el Cristo es la única persona en el mundo nacido de mujer, que fue concebido sin pecado, porque su gestación no fue obra humana, sino que fue planificado desde antes de la fundación del mundo por Dios, con el propósito de redimir a la humanidad, de la maldición del pecado que entró a este mundo, por la desobediencia de Adán y Eva, en el comienzo mismo de nuestra historia.


Ahora bien, el hecho de que María fuera escogida por Dios, como madre de su Hijo, no la hace igual a Dios, pero la eleva a una posición de grandeza, por su obediencia al Señor, digna de ser imitada, no solo por las mujeres sino por cada persona en este mundo.
Ella sigue siendo tan humana como cualquiera de nosotros, necesitada de un Salvador, como ella misma lo manifiesta.
María respondió: ¡Le doy gracias a Dios con todo mi corazón,  y estoy alegre porque él es mi Salvador! Dios tiene especial cuidado de mí, que soy su humilde esclava.
Desde ahora todos me dirán: ¡María, Dios te ha bendecido! El Dios todopoderoso ha hecho grandes cosas contigo.
¡Su nombre es santo! Él nunca deja de amar a todos los que lo adoran.
Dios actúa con poder y hace huir a los orgullosos.
Quita a los poderosos de sus tronos, y da poder a los pobres.
(Lucas 1:46-52)

La creencia del pueblo evangélico no implica aceptación, adoración ni petición a las imágenes, que supuestamente, representan a María, y tampoco a ninguna otra imagen, de esas personas santas que vivieron en la antigüedad, menos aún, a las imágenes que dicen representar a Jesús.  

¿Por qué no aceptamos, ni adoramos las imágenes y por qué no  hacemos peticiones a ellas?

Porque somos seguidores del Cristo resucitado, y nuestro manual de vida, es el evangelio de Jesucristo, y la santa palabra de Dios.
Y nuestro Señor Jesucristo nos dijo; De cierto, de cierto les digo:
El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aún mayores hará, porque yo voy al Padre.  
Y todo lo que pidieran al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.  Si algo piden en mi nombre, yo lo haré.
(Juan 14:12-14)

Además, el Señor nuestro Dios, nos ha dejado mandamientos específicos, con respecto a las imágenes, y posibles figuras que el ser humano podría hacer, y qué actitud tomar con respecto a ellas, que lugar deben ocupar en cuanto a nuestra creencia y adoración a Dios.
El mandamiento divino dice; No tengan otros dioses aparte de mí. 
No hagan ídolos, ni imágenes de nada que esté en el cielo, en la tierra o en lo profundo del mar. 
No se arrodillen ante ellos, ni hagan cultos en su honor.
(Éxodo 20:1)

Por lo tanto, el pueblo evangélico no usa imágenes para su adoración a Dios, ¡porque es imposible representar físicamente con algo al Dios viviente!
Además, el conocimiento de la persona de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, es espiritual y no física, los que vivieron en la época cuando Jesús estuvo físicamente en esta tierra, lo vieron en lo físico nosotros lo vemos en el Espíritu.

No rezamos, ni oramos a los santos varones o mujeres, que ya han partido para estar en la presencia de Dios, porque esa práctica está prohibida por nuestro Dios.
Está escrito que ningún hombre o mujer, deberá consultar a los muertos o hablar con ellos. (Levítico 20:27) ellos ya cumplieron con el propósito de Dios en esta tierra, ahora ya se fueron a descansar, por lo tanto ya no tienen conexión con el mundo de los vivos, están en otra dimensión.

Cuando en La Biblia leemos acerca de los santos, son aquellas personas que fueron santificadas por Dios en Cristo.
Se refiere, a las personas que viven físicamente, que trabajan, estudian, atienden a su familia, sufren, lloran, se divierten, asumen responsabilidades, son parte de la sociedad, pero diferente, pues son personas que han nacido de nuevo en Cristo Jesús, por lo tanto practican la santidad de vida diaria, dependiendo de Cristo para todas sus acciones.

O sea que los santos no son solamente los que han muerto en santidad, sino los que viven una vida de santidad, y cuando parten de este mundo, continúan viviendo eternamente en esa condición.
Por eso María, los Apóstoles del Señor, y todos los hombres y mujeres de la antigüedad que han muerto físicamente, ya no pueden hacer nada por nosotros que estamos vivos, pues están en una dimensión diferente, en espera de la resurrección final.

La única persona que vivió, murió y resucito es nuestro Señor Jesucristo. 
Él dice esto; No tengas miedo. Yo soy el primero y el último, y estoy vivo.
Estuve muerto, pero ahora vivo para siempre, y tengo poder sobre la muerte.  Apocalipsis 1:17-18

Esto explica porque no tenemos necesidad de imágenes. Nuestra adoración y petición es al que vive por los siglos de los siglos.
Bendiciones. Pastor Sosa

Pensemos en el dinero


Es tiempo que pensemos, que tener dinero es bueno y necesario, pues usándolo correctamente se pueden realizar muchas cosas en bien nuestro, de la familia y de la sociedad en la cual vivimos.
El asunto es ¿De qué manera llega a nosotros ese dinero?
Ya que hay varias formas de conseguirlo.
Pero ¿Cuál es la correcta?
Porque últimamente el ser humano está un poco confundido con respecto a esto, ya que ofrecen distintas alternativas para conseguirlo, una es trabajando, otra a través del juego de azar o de las otras que no voy a nombrar, pero que todos conocemos.
También debemos pensar en
¿Cómo lo voy a usar? ¿Cuáles son mis prioridades?
Porque el dinero debe ser nuestro sirviente, no nuestro amo, de lo contrario en lugar de ser nuestra ayuda, pasa a ser nuestro problema.
Es importante y necesario saber cuál es el pensamiento de Dios referente a este tema, ya que la única palabra autorizada es la del que dijo,  mía es la plata, y  mío es el oro ha dicho Jehová de los ejércitos. (Hageo 2:8)
Es tiempo que pensemos, que tener dinero es bueno y necesario,…
Pero, Dios nos advierte por medio de Su Palabra que; raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores. (1 Timoteo 6:10)  
También dice: A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos.
Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna. (1 Timoteo 6:17-19)
Ahora bien, no mal interpretemos, Dios no está en contra de las riquezas ni de los ricos. Sino más bien lo que nos quiere enseñar, es el buen uso de la riqueza.
Él quiere librarnos del egoísmo natural del ser humano, que normalmente busca acumular más de lo necesario, sin importarle las necesidades del que menos tiene o el indigente.
Pero, recuerde también que las Sagradas Escrituras dice; El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno para que tenga que compartir con el que padece necesidad. (Efesios 4:28)
También debemos tener en cuenta que Dios no avala la vagancia, ni la ociosidad, sino que permanentemente nos insta a trabajar.
En 2 Tesalonicenses 3:10-13 dice; Porque también cuando estábamos con ustedes, les ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, que tampoco coma.
Porque oímos que algunos de entre ustedes andan desordenadamente, no trabajando en nada, sino entremetiéndose en lo ajeno. A los tales mandamos y exhortamos por nuestro Señor Jesucristo, que trabajando sosegadamente, coman su propio pan. Y ustedes no se cansen de hacer bien.
Esto no se refiere a las personas, que queriendo trabajar, no consiguen,
Sino que es para aquellos, que no quieren trabajar, que les gusta vivir de “arriba”, porque trabajo siempre hay, lo que suele faltar, es una buena paga en efectivo. Pero es cierto también, que el bien que hacemos a alguien, nunca queda sin su recompensa.
Siempre que necesite trabajar, no pregunte ¿cuánto va a ganar? Sino ¿Cuánto va a aprender? Porque lo que gane, cualquiera sea el monto recibido, se termina. En cambio lo que aprenda, por más pequeño que sea, lo acompañará toda la vida, y le hará ganar lo necesario.
La buena persona debe tener por costumbre, cultivar la cultura del trabajo honesto, el comercio lícito, la profesión sabia y el oficio responsable, con los cuales pueda ganarse el sustento propio y para la familia, como así también ayudar al prójimo.
Asimismo es de sabios e inteligentes animar a los adolescentes y jóvenes, que aunque estén estudiando traten de ocupar el tiempo libre en algo provechoso, tratando de aprender algo más que les permita tener su propio dinero a fin de  costearse sus estudios académicos y colaborar con sus padres en ese sentido.
Por ultimo dice el Salmo 112  Bienaventurado el hombre que teme a Dios, bienes y riquezas hay en su casa, el hombre de bien tiene misericordia y presta, no tendrá temor de malas noticias, su corazón está firme, confiado en Dios. Se  deleita en la Palabra de Dios y todo lo que hace prosperara.
El dinero es necesario pero no debemos dejarnos esclavizar por él. Proverbios 10:22 dice; la bendición de Dios es la que enriquece, y no trae tristeza con ella. 
Bendiciones. Pastor Sosa


El secreto de la vida



¡Cuántos debate hay sobre la vida! Especialmente de cómo vivirla, cada uno tiene su propia teoría con respecto a esto. 
Y todos coincidimos en que queremos vivir y disfrutar  de la vida.
El problema es que no sabemos o no entendemos
¿Qué es disfrutar de algo sin que eso nos dañe?, o ¿qué es en realidad divertirse y pasarla bien?
Y al estar equivocado con respecto a eso, hace también que nos equivoquemos con respecto a la forma de hacerlo o vivirlo.
El escritor sagrado también estaba en esa búsqueda y él dice;
También me dije a mí mismo:
Ahora voy a hacer la prueba divirtiéndome; voy a darme buena vida.
¡Pero hasta eso resultó vana ilusión! quise probar el estímulo del vino, y me entregué a él para saber si eso es lo que más le conviene al hombre durante sus contados días en este mundo.
Tuve cantores y cantoras, placeres humanos y concubina tras concubina.
Fui un gran personaje,  nunca me negué ningún deseo; jamás me negué ninguna diversión. 
Eclesiastés 2  
Pero luego de todo esto descubre que todo lo que considera disfrutar de la vida como ser, diversión a su manera, darse al vino y andar de parranda, entregarse a los placeres sexuales, tener mujeres y no negarse ningún deseo no le produce satisfacción interior, sino que es algo pasajero, que termina ese momento y termina todo.
Entonces dice; Llegué a odiar la vida, pues todo lo que se hace en este mundo resultaba en contra mía. 
Realmente, todo es vana ilusión, ¡es querer atrapar el viento!  Llegué a odiar también todo el trabajo que había realizado en este mundo.
¡Qué tristeza! Pues lo mismo que descubre el escritor sagrado es lo que descubrimos nosotros cuando buscamos vivir la vida a nuestra manera, terminamos desilusionados.
Lo que pasa es que los seres humanos creemos que sabemos vivir bien, y no es así, necesitamos aprender a vivir, necesitamos que alguien nos enseñe aun cuando no nos guste que así sea.
Es por eso que debemos prestarle atención a aquel que dijo; Yo he venido para que tengan vida plena y abundante. Juan 10:10 
Al Dios eterno creador nuestro le importa mucho y se interesa por nuestro bienestar, por la vida que vivimos aunque a veces no lo entendemos así.
El ser humano tiene la idea o el concepto erróneo de que Dios está para arruinarle la diversión.
Que no quiere que el hombre sea feliz, que se divierta, que disfrute de la libertad, que viva su vida, cree que Dios quiere que sea un religioso aburrido.
Nada más lejos de la verdad, si bien las religiones muchas veces hacen pensar eso con sus exigencias humanas, no es lo que Dios espera de sus criaturas.
Nos parecemos mucho al escritor bíblico en su queja, es que los escritores bíblicos fueron tan humanos como nosotros, es por eso que nos vemos reflejados en muchas situaciones que ocurrieron en el pasado, tenemos las mismas luchas o controversias que ellos tenían.
Pero en su búsqueda de encontrar el sentido de la vida. El escritor sagrado continúa diciendo;
Dios, en el momento preciso, todo lo hizo hermoso; puso además en la mente humana la idea de lo infinito, aun cuando el hombre no alcanza a comprender en toda su amplitud lo que Dios ha hecho y lo que hará.
Nosotros también necesitamos encontrar el sentido de nuestra vida, para saber para qué estamos en este mundo, como podemos disfrutar cada día de nuestra existencia en esta tierra y para reconocer que todo lo que sucede en este mundo es porque Dios lo permite.
Necesitamos cambiar nuestra actitud, pues somos contradictorios en lo que queremos y lo que hacemos.
 Por ejemplo; nos gustaría vivir mucho tiempo y llegar bien fuerte a la vejez, pero no ocurre eso.
 La respuesta la encontramos en nuestras propias acciones, en nuestra manera de vivir, en nuestro comportamiento, en nuestra forma de pensar.
Decimos voy a disfrutar de la vida, no me voy a privar de nada, voy a hacer lo que quiero, lamentablemente lo que nos gusta hacer no siempre es lo correcto, lo que queremos hacer sin que nadie nos diga nada, muchas veces es destructivo para nuestra vida.
Por eso al poco tiempo nos damos cuenta que nuestra salud se va deteriorando, entonces tratamos de ocultar lo que nos pasa y sufrimos en silencio ese deterioro físico, emocional, afectivo, y empeoramos la situación.
Se cree que haciendo lo malo, viviendo mal, se puede disfrutar de una vida agradable y que todo les ira bien, y no es así.
El apóstol Pablo descubrió esto y escribió para advertirnos del peligro;
Todo me es permitido pero no todo conviene, todo me es permitido pero yo no me dejare dominar por ninguno. 1 Corintios 6:12
Las Sagradas Escrituras nos recuerda que; no debemos engañarnos a nosotros mismos, todo lo que sembramos, eso vamos a cosechar. Si sembramos maldad, cosecharemos maldad.
Si sembramos corrupción, cosecharemos corrupción. Gálatas 6:7-8

Por eso es muy importante lo que hacemos, como nos comportamos, cuales son nuestros gustos o deseos.
Darnos todos los gustos no significa que disfrutemos de la vida.
Bendiciones. Pastor Sosa

martes, 24 de julio de 2018

Deberes y Privilegios


El ser humano tiene deberes y privilegios desde el momento mismo que ha sido creado en este mundo. A los deberes les llamamos responsabilidad y a los privilegios les llamamos derechos. Estos deberes y privilegios nos fueron otorgados por el Creador del universo con el propósito de equiparnos para realizar la tarea que nos encargaba como seres humanos. Entonces dijo: Ahora hagamos al hombre a nuestra imagen. Él tendrá poder sobre los peces, las aves, los animales domésticos y los salvajes, y sobre los que se arrastran por el suelo.
Cuando Dios creó al hombre, lo creó a su imagen; varón y mujer los creó,  y les dio su bendición: Tengan muchos, muchos hijos; llenen el mundo y gobiérnenlo; dominen a los peces y a las aves,
y a todos los animales que se arrastran.
Después les dijo: Miren, a ustedes les doy todas las plantas de la tierra que producen semilla, y todos los árboles que dan fruto. Todo eso les servirá de alimento.  Pero a los animales salvajes, a los que se arrastran por el suelo y a las aves, les doy la hierba como alimento. Así fue,  y Dios vio que todo lo que había hecho estaba muy bien. De este modo se completó el sexto día. (Génesis 1:26-31)
Ahora bien es normal entre las personas reclamar sus derechos. Pero debemos darnos cuenta que yo, como persona no puedo obligar a mi prójimo a hacer algo que no quiere o no esta dispuesto a hacerlo. Por ejemplo; no puedo obligarlo a que me respete o a que haga algo por mí, me respetará si él considera que soy digno de respeto o me ayudará si quiere y si tiene ganas de hacerlo.
Yo puedo pedirle, puedo exigirle, puedo suplicarle, pero no puedo obligarle, eso lo debemos entender pues por causa de que eso no se tiene en cuenta, es que hay problemas que surgen en los momentos menos esperado
Sin embargo yo tengo poder y autoridad sobre mi mismo. Es ahí donde debemos poner el énfasis ¿Por qué? Muy sencillo, porque si yo cumplo con mis obligaciones con responsabilidad, sin dudar puedo asegurar que el derecho de mi prójimo no será avasallado, y si mi prójimo es responsable con sus obligaciones como persona, mis derechos no estarán en peligro.
Viéndolo de esta manera, tomando las palabras del Maestro de los maestros, Jesús, que dijo; traten a los demás como les gustaría ser tratados ustedes. ¡Excelente principio de convivencia!
Practicando esto no habría problemas al relacionarnos con los demás, la vida en sociedad sería diferente, mucho más distendida, más agradable y menos tensionada. ¿No le parece maravilloso?  Cuantas marchas nos ahorraríamos, cuantos enfrentamientos inútiles, cuantas discusiones estériles, y estaríamos continuamente promoviendo la paz, tan necesaria en la vida familiar, entre amigos y en la sociedad toda.
Es en esto donde necesitamos ser sabios, es para nuestro bien que debemos tomar las enseñanzas de la palabra de Dios. En ella leemos lo siguiente; ¡Cuánto amo tu enseñanza! ¡Todo el día medito en ella!  Tus mandamientos son míos para siempre; me han hecho más sabio que mis enemigos.  Entiendo más que todos mis maestros porque pienso mucho en tus mandatos.  Entiendo más que los ancianos porque obedezco tus preceptos.  He alejado mis pies de todo mal camino para cumplir tu palabra.  No me he apartado de tus decretos porque tú eres quien me enseña.  Tu promesa es más dulce a mi paladar que la miel a mi boca.  De tus preceptos he sacado entendimiento; por eso odio toda conducta falsa.  
Tu palabra es una lámpara a mis pies y una luz en mi camino. (Salmo 119:97-105)
Cuan necesario es priorizar las obligaciones que como personas tenemos, pues eso es lo que nos garantiza una buena convivencia humana, donde los derechos del prójimo serán respetados sin tener necesidad de estar exigiendo continuamente.
Eso también nos lleva a que nos valoricemos como personas, que nos cuidemos y que el otro sea importante para mí. Saber que el mayor derecho de los humanos es, el derecho a la vida y esto incluye también el derecho a estudiar, capacitarnos, trabajar, tener tiempo de esparcimiento, de sana diversión, derecho de desarrollar la vocación y las cualidades que vayamos descubriendo, derecho a la familia y a disfrutar de todo lo bueno que la vida nos otorga.  
Bendiciones. Pastor Sosa


Avaricia


Es tiempo que pensemos que.
Los países y sus respectivos gobiernos, no son perfectos, tienen muchas fallas y nosotros como argentinos tampoco escapamos de esta realidad.
No hay gobierno perfecto, porque los gobiernos están compuestos por personas, y las personas no somos perfectas. Como consecuencia es natural que haya tantos problemas sociales, porque somos parte de una sociedad necesitada. Lamentablemente no sabe o no reconoce cuál es su verdadera necesidad.
Porque los problemas que a diario surgen y trae caos en la sociedad, no siempre tienen que ver con lo económico o material. Debemos recordar que la persona no solo es un cuerpo, sino que tiene un alma y un espíritu, y para solucionar los problemas tenemos necesidad de ver a la persona completa, es decir; cuerpo, alma y espíritu.
Las Sagradas Escrituras relatan un episodio en la vida de Jesús, Lucas en el capítulo 12 nos cuenta que, ante un problema aparentemente económico que  unas personas le consultan a Jesús, les da esta respuesta: Miren, cuídense de toda avaricia; porque la vida de la persona no consiste en la abundancia de los bienes que posea.
Este es el problema que afecta al mundo, vivimos en un planeta rico, un mundo con muchos recursos naturales. Pero por causa de la avaricia de algunos, esas riquezas están en poder de unos pocos.
El verdadero problema del mundo, no es económico sino espiritual y eso afecta la moral del ser humano, que lo hace insensible a las necesidades de los demás. Los gobiernos no escapan a este comportamiento, si las personas y los gobernantes buscaran a Dios y creyeran en su palabra, el mundo sería diferente.
No hablo de religión, porque la religión divide a las personas y los pueblos y trae enfrentamientos inútiles y ninguna solución. Hablo de una persona capaz de traer solución al problema de la humanidad, hablo de aquel Jesús que dice: Busquen el reino de Dios y su justicia y las demás cosas vendrán por añadidura. Mateo 6:33
Jesús el Hijo de Dios, es el único capaz de transformar la conducta humana, es el único que puede cambiar la mentalidad de las personas, es el único que puede salvar al mundo.
El apóstol Pablo escribió; Cree en el Señor Jesucristo y serás salvo tú y tu casa. Hechos 16:31
Pensemos esto, si cada uno tomamos en cuenta este consejo, estaríamos a salvo de todo este sistema perverso en que vivimos, practicando la vida y conducta del reino de Dios.
Bendiciones.  Pastor Sosa

Comparaciones



Los seres humanos siempre estamos haciendo comparaciones.
También nos comparamos unos con otros. Esto normalmente comienza en la casa con los niños.
Los padres cometen el error de comparar entre hermanos y muchas veces los abuelos también lo hacen.
Se olvidan, nos olvidamos que cada persona es única, no hay dos que sean iguales. Pueden parecerse en lo físico, en algunos gestos, en la forma de vestir o caminar, pero en cuanto a la personalidad de cada uno, es irrepetible.
Por eso hay problemas cuando se hacen comparaciones entre personas. Por ejemplo cuando se dice: vos no sos como tu hermano o, vos sos igual a fulano.
Ocurre en la casa, la escuela o el trabajo. No siempre tienen la intención de hacer sentir mal a alguien, sino con el propósito de ayudarlo a mejorar, pero normalmente lo hace sentir mal.
Hay familias en el relato bíblico que cometieron este error de hacer comparaciones entre sus hijos y tuvieron grandes problemas.
Por eso Dios nos enseña por medio de su Palabra que si queremos compararnos con alguien, es con su amado Hijo Jesús que debemos compararnos, es más nos manda que le imitemos a él, pues nuestra meta debe ser parecernos a Cristo, ser como él.
Pero como no tenemos evidencia física de cómo era él. Debemos imitarlo en cuanto a su carácter, personalidad, moralidad, afecto, emociones y vida espiritual, pues de eso si tenemos muchísima información bíblica.
En Efesios 5:1 dice; Sean, pues, imitadores de Dios como hijos amados. Y en 1 Corintio 11:1 Pablo escribió; Sean imitadores de mí, así como yo de Cristo. Y en el libro de Romanos 8:29 dice; Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
Con estas recomendaciones de parte de Dios, podemos entender que con la única persona que continuamente debemos comparar nuestra vida, es con la persona de Cristo,
Pues es el único que nos desafía a superarnos cada día y ser mejores sin menospreciar a nadie.
Aprovechemos este mes donde casi toda la humanidad, recuerda y celebra el nacimiento de Jesús el Hijo de Dios, para investigar en las Sagradas Escrituras, como es el y de esa manera poder conocerlo bien para poder imitarlo. ¡Hermoso desafío!
Bendiciones.  Pastor Sosa