sábado, 26 de octubre de 2024

ESTO ES LA GRACIA DE DIOS.

Con el nacimiento de la Iglesia, la justificación ante Dios es por medio de la fe, no por buenas obras que hagamos.

Hermanos, ciertamente el anhelo de mi corazón, y mi oración a Dios es por la salvación de Israel, porque yo soy testigo de que tienen celo por Dios, pero no conforme al verdadero conocimiento. Ignorando la justicia de Dios y procurando establecer la suya propia, no se han sujetado a la justicia de Dios, pues el fin de la Ley es Cristo, para justicia a todo aquel que cree. Moisés escribe así de la justicia que es por la Ley: "El hombre que haga estas cosas vivirá por ellas". Pero de la justicia que es por la fe, dice así: "No digas en tu corazón: "¿Quién subirá al cielo?" (esto es, para traer abajo a Cristo); o, "¿quién descenderá al abismo?" (esto es, para hacer subir a Cristo de entre los muertos)". Pero ¿qué dice?: "Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón". Esta es la palabra de fe que predicamos: Si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo, porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. La Escritura dice: "Todo aquel que en él cree, no será defraudado", porque no hay diferencia entre judío y griego, pues el mismo que es Señor de todos, es rico para con todos los que lo invocan; ya que todo aquel que invoque el nombre del Señor, será salvo. ¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quién les predique? ¿Y cómo predicarán si no son enviados? Como está escrito: "¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!" Pero no todos obedecieron al evangelio, pues Isaías dice: "Señor, ¿quién ha creído a nuestro anuncio?" Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. Pero yo pregunto: ¿Acaso no han oído? Antes, bien, "Por toda la tierra ha salido la voz de ellos y hasta los fines de la tierra sus palabras". También pregunto: ¿No ha conocido esto Israel? Primeramente Moisés dice: "Yo os provocaré a celos con un pueblo que no es pueblo; con pueblo insensato os provocaré a ira". E Isaías dice resueltamente: "Fui hallado por los que no me buscaban; me manifesté a los que no preguntaban por mí". Pero acerca de Israel dice: "Todo el día extendí mis manos a un pueblo desobediente y rebelde". Romanos 10:1-21

El pueblo de Israel, como pueblo de Dios, recibió las leyes de Dios en el Monte Sinaí. Esas leyes daban a conocer al pueblo de Israel y a toda la humanidad, cuál es la escala de valores establecidas por Dios, en cuanto a la conducta y moralidad para el ser humano. La ley de Dios es el diagnóstico de la conducta humana, pues muestra que es imposible que se pueda cumplir realmente con lo que ella establece como norma de vida diaria. Por esa razón Dios también prometió un Mesías, un salvador que nació y vivió sin pecado, para que ocupe el lugar del ser humano y pague el precio del pecado, que es la muerte.

Este salvador vino para Israel, pero como no fue aceptado por su pueblo, Dios abre la puerta de la salvación por gracia a toda la humanidad. Porque no es por obra, sino por GRACIA, toda la humanidad tiene la misma oportunidad de ser salvo, esto es judíos y gentiles todos por igual. Porque el único requisito es creer. La biblia dice; Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. Juan 1:17. Así Dios muestra que es Justo, porque solamente el pueblo de Israel conocía la ley de Dios, nosotros, el pueblo gentil no la conocíamos, por lo tanto no la podíamos cumplir. Sin embargo en Cristo, todos tenemos libre acceso al trono de la gracia de Dios. ¡Maravilloso amor de Dios! manifestándose para judíos y gentiles que han decidido creer en Cristo como su único Salvador, obteniendo la salvación por gracia.

Los abraza en Cristo. P. Sosa. 

miércoles, 23 de octubre de 2024

Iglesia de Cristo.

 ¡Ojo, con las falsas enseñanzas!

Como ya te rogué al irme a la región de Macedonia, quédate en Éfeso, para ordenar a ciertas personas que no enseñen ideas falsas ni presten atención a cuentos y cuestiones interminables acerca de los antepasados. Estas cosas llevan solamente a la discusión y no ayudan a conocer el designio de Dios, que se vive en la fe. El propósito de esa orden es que nos amemos unos a otros con el amor que proviene de un corazón limpio, de una buena conciencia y de una fe sincera. Algunos se han desviado de esto y se han perdido en inútiles discusiones. Quieren ser maestros de la ley de Dios, cuando no entienden lo que ellos mismos dicen ni lo que enseñan con tanta seguridad. Sabemos que la ley es buena, si se usa de ella conforme al propósito que tiene.  1 Timoteo 1:3-11

En el mundo entero, las falsas enseñanzas siempre estuvieron y estarán, porque siempre habrá falsos maestros que quieren enseñar a otros, cosas que ellos mismos no han aprendido, aspectos de vidas que nacen de su propio corazón, sencillamente les gusta sin detenerse a pensar, si es bueno o es malo, si es saludable o destructivo, si ayuda o entorpece la vida de los oyentes.  De estas personas y de sus enseñanzas hay que cuidarse, para no ser engañados y sin querer se aparten de la verdad del evangelio de Cristo.

Hablan y enseñan cosas que le son desconocidas para ellos, que solo tienen una vaga noción porque no han tenido esa experiencia de vida nueva en el Señor, sobre todo cuando se trata de aspectos de vida espiritual y de principios y valores que están arraigados profundamente en la palabra de Dios. Siempre hay que tener presente lo que el Señor Jesús dijo; por sus frutos serán conocidos.

Es por eso que el apóstol Pablo recomienda a su discípulo Timoteo, estar atento a esas falsas enseñanzas destructivas, a fin de que no sea dañada la comunión de la iglesia por causa de esas ideas hipócritas y legalistas de falsa piedad. Y esa misma palabra nos advierte hoy a nosotros, los creyentes en Cristo Jesús, para que tengamos cuidados de qué es lo que creemos, y a quien le estamos creyendo. ¿Cómo saberlo? Si lo que creemos nos edifica, conduciendo al respeto y el amor de los unos por los otros, es de Dios, en cambio si lo que se cree destruye, enfrenta y separa trayendo odio, amargura y resentimiento, eso no proviene de Dios. Porque lo que viene de Dios edifica, corrige, consuela y exhorta  en amor, trayendo fortaleza y unidad al cuerpo de Cristo, que es la iglesia.

Los abraza en Cristo. P. Sosa. 

domingo, 20 de octubre de 2024

 

Israel no entendió el propósito de Dios con ellos y rechazaron al Mesías.

No que la palabra de Dios haya fallado; porque no todos los que descienden de Israel son israelitas, ni por ser descendientes de Abraham, son todos hijos; sino: En Isaac te será llamada descendencia. Esto es: No los que son hijos según la carne son los hijos de Dios, sino que los que son hijos según la promesa son contados como descendientes. Porque la palabra de la promesa es esta: Por este tiempo vendré, y Sara tendrá un hijo. Y no sólo esto, sino también cuando Rebeca concibió de uno, de Isaac nuestro padre (pues no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no por las obras sino por el que llama), se le dijo: El mayor servirá al menor. Como está escrito: A Jacob amé, más a Esaú aborrecí. ¿Qué, pues, diremos? ¿Que hay injusticia en Dios? En ninguna manera. Pues a Moisés dice: Tendré misericordia del que yo tenga misericordia, y me compadeceré del que yo me compadezca. Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia. Porque la Escritura dice a Faraón: Para esto mismo te he levantado, para mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra. De manera que de quien quiere, tiene misericordia, y al que quiere endurecer, endurece. Pero me dirás: ¿Por qué, pues, inculpa? porque ¿quién ha resistido a su voluntad? Más antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que alterques con Dios? Dirá el vaso de barro al que lo formó: ¿Por qué me has hecho así? ¿O no tiene potestad el alfarero sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y otro para deshonra? ¿Y qué, si Dios, queriendo mostrar su ira y hacer notorio su poder, soportó con mucha paciencia los vasos de ira preparados para destrucción, y para hacer notorias las riquezas de su gloria, las mostró para con los vasos de misericordia que él preparó de antemano para gloria, a los cuales también ha llamado, esto es, a nosotros, no sólo de los judíos, sino también de los gentiles? Como también en Oseas dice: Llamaré pueblo mío al que no era mi pueblo, Y a la no amada, amada. Y en el lugar donde se les dijo: Vosotros no sois pueblo mío, Allí serán llamados hijos del Dios viviente. También Isaías clama tocante a Israel: Si fuere el número de los hijos de Israel como la arena del mar, tan sólo el remanente será salvo; porque el Señor ejecutará su sentencia sobre la tierra en justicia y con prontitud. Y como antes dijo Isaías: Si el Señor de los ejércitos no nos hubiera dejado descendencia, Como Sodoma habríamos venido a ser, y a Gomorra seríamos semejantes. ¿Qué, pues, diremos? Que los gentiles, que no iban tras la justicia, han alcanzado la justicia, es decir, la justicia que es por fe; más Israel, que iba tras una ley de justicia, no la alcanzó. ¿Por qué? Porque iban tras ella no por fe, sino como por obras de la ley, pues tropezaron en la piedra de tropiezo, como está escrito: He aquí pongo en Sion piedra de tropiezo y roca de caída; Y el que creyere en él, no será avergonzado.

Romanos 9:6-33

Con la venida de Cristo a este mundo, naciendo de la virgen María en forma humana, y siendo rechazado por Israel, se abre la puerta del reino de Dios por medio de Cristo, para todas las naciones de la tierra, dando cumplimiento a la promesa hecha a Abraham. Ahora, en este tiempo, es la iglesia la encargada de extender el reino de Dios. Pero, ¡ojo! La iglesia de Cristo, nunca suplantó a Israel, es otro ente diferente, portadora de las buenas noticias para la humanidad. ¡La salvación por gracia! Dios abre un paréntesis con Israel, e inserta a la iglesia, para la proclamación del evangelio de Jesucristo. Recordemos que la iglesia se nutre de judíos y gentiles, ahora en Cristo somos un cuerpo, el cuerpo de Cristo en la tierra.

Israel es un pueblo étnico que tiene su tierra en medio oriente, la iglesia es un pueblo espiritual, cuya ciudadanía está en los cielos de donde también esperamos a nuestro Señor y salvador Jesucristo.

Los abraza en Cristo. P. Sosa.

viernes, 18 de octubre de 2024

Entendiendo el propósito de Dios.

El apóstol Pablo explica la elección y propósito de Israel por parte de Dios.

Verdad digo en Cristo, no miento, y mi conciencia me da testimonio en el Espíritu Santo, que tengo gran tristeza y continuo dolor en mi corazón. Porque deseara yo mismo ser anatema, separado de Cristo, por amor a mis hermanos, los que son mis parientes según la carne; que son israelitas, de los cuales son la adopción, la gloria, el pacto, la promulgación de la ley, el culto y las promesas; de quienes son los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén. Romanos 9:1-5

La biblia siempre hace la diferencia entre gentiles y judíos. Los judíos pertenecen al pueblo de Israel y los gentiles al resto de las naciones. Usted se preguntará ¿Por qué Israel es el pueblo de Dios? Porque es el único pueblo formado por Dios, a partir de un matrimonio.

Abraham y su esposa eran ancianos, ella era estéril, no podía tener hijos. Sin embargo, Dios le llama y le promete que le daría un hijo, y la descendencia sería tanta que no se podrá contar.  El propósito de este pueblo era a través del cual Dios manifestaría al mundo los valores y principios morales para la humanidad. Les pide obediencia y fidelidad para que les vaya bien en todo lo que emprendan. La biblia dice; Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré.
Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra. Génesis 12:1

La iglesia de Cristo está compuesta por judíos y gentiles. En este tiempo del evangelio de la gracia, es la iglesia la responsable del anuncio de esta buena noticia para todo el mundo, y mostrar con su vida y conducta los principios y valores morales del reino de Dios. Además como iglesia debemos bendecir a Israel el pueblo de Dios, porque gracias a ellos que rechazaron al Mesías, nosotros hemos alcanzado la salvación por gracia. Pero Dios no desechó a Israel, solo que por ahora está en el banco de suplente, esperando el momento de volver a entrar en la cancha y ser protagonista, lo cual va a ocurrir cuando la iglesia de Cristo sea sacada de la tierra.

Los abraza en Cristo. P. Sosa.

 

viernes, 11 de octubre de 2024

La Biblia es el Tomógrafo de Dios para la humanidad.

Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta. Hebreos 4:12-13.

En todo el mundo hay un deterioro generalizado de la salud y de la moralidad humana, ya sea por los conflictos bélicos, la situación climática, los migrantes en busca de una mejor vida, la contaminación ambiental del planeta, y la corrupción. Las personas buscan aliviar su situación, buscando en la religión, la ciencia médica, la política, los gobiernos de turno, en brujos, adivinos, o cualquier cosa humana que le ofrezcan. Tal vez usted se pregunte, ¿Por qué las personas y el mundo están en esta situación, que es realmente lo que enferma y trastorna la conducta ética y moral del ser humano? La política no tiene respuesta, la religión tampoco, y la ciencia trata de encontrar una solución, pero hasta ahora sin éxito. La humanidad continúa sin fe y sin esperanza en este mundo, con angustias, dolores, muertes y sufrimientos.

Para una respuesta concreta necesitamos ir a la biblia, ella como la palabra de Dios, tiene el diagnóstico perfecto, tratamiento y sanidad para el ser humano. Las Sagradas Escrituras dicen; Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan; por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos. Hechos 17:30-31

Cuando se busca ayuda de Dios, su diagnóstico muestra que el problema humano está en el corazón del hombre, y se llama pecado; El Señor vio que era demasiada la maldad del hombre en la tierra y que éste siempre estaba pensando en hacer lo malo, y le pesó haber hecho al hombre. Génesis 6:5. Y también dijo; No volveré más a maldecir la tierra por causa del hombre; porque el intento del corazón del hombre es malo desde su juventud; ni volveré más a destruir todo ser viviente, como he hecho. Génesis 8:21. Jesús dijo que lo que enferma y contamina al ser humano es; Lo que sale de la boca, del corazón sale; y esto contamina al hombre. Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias. Estas cosas son las que contaminan al hombre; pero el comer con las manos sin lavar no contamina al hombre. Mateo 15:19. Esto es diagnostico divino con respecto a la salud y moralidad de la humanidad. Dios dice; Nada hay tan engañoso y perverso como el corazón humano. ¿Quién es capaz de comprenderlo? Yo, el Señor, que investigo el corazón y conozco a fondo los sentimientos; que doy a cada cual lo que se merece, de acuerdo con sus acciones. Jeremías 17:9.

¿Qué hacer para solucionar este problema? Con todo este panorama, queda claro que el verdadero problema de la humanidad, es el pecado que impera en el corazón humano y en el mundo, el resto son las consecuencias de esa conducta pecaminosa. Ahora bien leemos en la biblia que Dios dice; Dame, hijo mío, tu corazón, Y miren tus ojos por mis caminos. Proverbios 23:26  Vengan, pongamos las cosas en claro dice el Señor. ¿Son sus pecados como escarlata? ¡Quedarán blancos como la nieve! ¿Son rojos como la púrpura? ¡Quedarán como la lana! Isaías 1:18

Por lo tanto toda persona en este mundo necesita ir a Dios. Solamente en Dios y su obra redentora en Cristo, está la sanidad y transformación de vida de cada persona. Fuera de Dios este mundo no tiene solución, va camino a su propia muerte y condenación. Pero está en la persona creer esto que dijo Jesús; Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios. Juan 3:16

La gracia de Dios es tan amplia que alcanza para toda persona que reconoce que necesita del perdón de Dios. Lo maravilloso de esta gracia es que, no tiene nada que pagar la persona, solo debe creer que Cristo en la cruz lo hizo por ella. Jesucristo se ofreció en sacrificio para que nuestros pecados sean perdonados; y no sólo los nuestros, sino los de todo el mundo. 1 Juan 2:1. Crea en Cristo y acérquese a Dios, porque, El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia. Proverbios 28:13. Además, de Dios nada se puede esconder; el salmista dijo; Oh Jehová, tú me has examinado y conocido. Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; Has entendido desde lejos mis pensamientos. Has escudriñado mi andar y mi reposo, Y todos mis caminos te son conocidos. Salmo 139:1.

Por último recuerde;  Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento. Marcos 2:17

Los abraza en Cristo. P. Sosa.  

miércoles, 9 de octubre de 2024

En tiempo difícil. ¡La buena noticia del día!

¿Sabía usted lo que la biblia dice, acerca de las personas que hemos creído en Cristo como nuestro salvador personal?

Nosotros somos una familia escogida, un sacerdocio al servicio del rey, una nación santa, un pueblo adquirido por Dios. Y esto es así para que anunciemos las obras maravillosas de Dios, el cual nos llamó a salir de la oscuridad para entrar en su luz maravillosa. Nosotros antes ni siquiera éramos pueblo, pero ahora somos pueblo de Dios; antes Dios no nos tenía compasión, pero ahora nos tiene compasión. 1 Pedro 2:9

¡Esto es algo difícil de creer! ¡Pero es verdad!, Dios transforma la vida de un pecador, en una vida santificada para ser hijo, servir a Dios y formar parte de su pueblo santo.

En la actualidad toda persona que se reconoce pecadora y quiere un cambio de vida, solo debe acercarse a Dios por medio de Cristo, con un corazón contrito y humillado esperando en la misericordia de Dios, para el perdón de sus pecados. Lo maravilloso es que para la persona, ¡la salvación no tiene costo alguno, es gratis, es un regalo de Dios, es por gracia! ¡Solo debe creer! La biblia dice; Porque por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe; esto no procede de ustedes, sino que es el regalo de Dios,
no por obras, para que nadie se jacte. Efesios 2:8.
En otra ocasión le preguntaron al apóstol Pablo; ¿qué tengo que hacer para ser salvo? El apóstol Pablo le contesta. Cree en el Señor Jesús; así tú y tu familia serán salvos. Hechos 16:31. Esto es algo tan fácil de hacer, pero es muy difícil de creer que sea así, porque las enseñanzas religiosas dicen otras cosas, que hace casi imposible poder ser salvos.

La gran mayoría de las personas piadosas, tienen falsas enseñanzas sobre Dios, el perdón de los pecados y la salvación eterna. Las religiones enseñan que Dios es malo, que siempre está dispuesto a castigar al pecador, y para ser perdonados por Dios hay que cumplir una serie de requisitos, que incluyen buenas obras, sacrificios, penitencias, promesas, cumplimientos de rituales, bautismos, confirmación y otras tradiciones religiosas. ¡Nada más lejos de la verdad!

Sin embargo cuando vamos a la biblia encontramos que; Dios es amor, que quiere que todas las personas sean salvas, que nadie se pierda. Es tan grande el amor, la misericordia y la compasión de Dios hacia el ser humano, Que de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. Juan 3:16, esta es la verdad del evangelio de Cristo, ¡la salvación por gracia!

Al creer en Cristo y su palabra, nacemos de nuevo, nos adopta como hijos, pasamos a formar parte del pueblo de Dios, y podemos contarle a todo aquel que quiera escuchar, lo maravilloso que es vivir en Cristo y ser miembro de la familia de Dios. Usted, ¿Ya forma parte de esta familia?

Los abraza en Cristo. P. Sosa.

 

domingo, 6 de octubre de 2024

Reflexión mirando la actualidad en el Oriente Medio.

Nuestra justificación es por la gracia de Dios, no por algo que hayamos hecho.

Recuerda a los otros que se sometan al gobierno y a las autoridades, que sean obedientes y que siempre estén dispuestos a hacer lo bueno. Que no hablen mal de nadie, que sean pacíficos y bondadosos, y que se muestren humildes de corazón en su trato con todos. Porque antes también nosotros éramos insensatos y rebeldes; andábamos perdidos y éramos esclavos de toda clase de deseos y placeres. Vivíamos en maldad y envidia, odiados y odiándonos unos a otros. Pero Dios nuestro Salvador mostró su bondad y su amor por la humanidad, y, sin que nosotros hubiéramos hecho nada bueno, por pura misericordia nos salvó lavándonos y regenerándonos, y dándonos nueva vida por el Espíritu Santo. Pues por medio de Jesucristo nuestro Salvador nos dio en abundancia el Espíritu Santo, para que, después de hacernos justos por su bondad, tengamos la esperanza de recibir en herencia la vida eterna. Esto es muy cierto, y quiero que insistas mucho en ello, para que los que creen en Dios se ocupen en hacer el bien. Estas cosas son buenas y útiles para todos. Tito 3

¡El tiempo se acaba! ¡Lo creas o no! ¡Todo lo que está aconteciendo en el mundo lo aval! La humanidad toda comenzó a transitar los últimos tiempos de la gracia de Dios para salvación a todo aquel que cree en Cristo. La salvación por gracia de Dios, tiene fecha de vencimiento, y está llegando al final, se crea o no, se acepte o no, se ignore o no. La puerta de la gracia está próxima a cerrarse. Cristo viene por los que somos suyos, y luego los que han rechazado la gracia de Dios, tendrán que pasar por un periodo de sufrimiento sin igual, es por esto la advertencia bíblica que dice; Hermanos, cuídense de que ninguno de ustedes tenga un corazón tan malo e incrédulo que se aparte del Dios viviente. Al contrario, anímense unos a otros cada día, mientras dura ese «hoy» de que habla la Escritura, para que ninguno de ustedes sea engañado por el pecado y su corazón se vuelva rebelde. Porque nosotros tenemos parte con Cristo, con tal de que nos mantengamos firmes hasta el fin en la confianza que teníamos al principio. Por lo cual dice: Si hoy escuchan ustedes lo que Dios dice, no endurezcan su corazón como aquellos que se rebelaron. Hebreos 3:12

Esto es para estar alerta como iglesia de Cristo, con la lámpara encendida y el aceite de repuesto, no es para asustar ni condenar a nadie, es un llamado a reflexionar en nuestra conducta diaria, a la luz de la palabra de Dios, siendo personas sabias en el trato y relación con los demás, alentándonos unos a otros a permanecer en la verdad bíblica, o sea en Cristo en quien está asegurada la salvación de nuestra alma y la vida eterna. Por lo tanto, mantengamos los ojos puestos en Jesús, el autor y consumador de la fe.

Los abraza en Cristo. P. Sosa.

viernes, 4 de octubre de 2024

¡Defendamos la familia!

 

El matrimonio y la familia, tienen enemigos que tratan de hacerlo fracasar.

Lo más destructivo de una relación matrimonial es la infidelidad,  generalmente comienza en el tiempo del noviazgo, continúa en el matrimonio y afecta las relaciones entre ambos porque se considera una falta de respeto hacia el otro. En las Sagradas Escrituras leemos esto; Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho sin mancilla; pero a los fornicarios y a los adúlteros los juzgará Dios. Hebreos 13:4… pero a causa de las fornicaciones, cada uno tenga su propia mujer, y cada una tenga su propio marido. El marido cumpla con la mujer el deber conyugal, y asimismo la mujer con el marido. La mujer no tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino el marido; ni tampoco tiene el marido potestad sobre su propio cuerpo, sino la mujer. 1 Corintios 7:1-5Más el que comete adulterio es falto de entendimiento; corrompe su alma el que tal hace. Proverbios 6:32.  Esto es sabiduría y es necesario creer que es así, y actuar en consecuencia evitando cualquier tipo de infidelidad ya sea física o emocional dentro del matrimonio.

El rol de la esposa en el hogar es fundamental y debe ser reconocida por el varón, porque eso hace una familia perdurable, la función principal de la mujer es ser esposa y madre, y cuando se entiende esto no hay competencia en el matrimonio, sino que se complementan perfectamente entre sí, y además no quita el hecho del trabajo y desarrollo de la mujer siempre en armonía con su esposo. Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas. El corazón de su marido está en ella confiado, Y no carecerá de ganancias. Le da ella bien y no mal Todos los días de su vida. Proverbios  31:10-12.

Muchas veces ante situaciones conflictivas se recurre al divorcio o separación, creyendo que así se solucionará el problema, esto es un error, es una mentira diabólica, agrava el problema, no trae ninguna solución, sobre todo si ya hay niños de por medio los cuales sufren las consecuencias.

El divorcio o rompimiento de relaciones matrimoniales, es un pensamiento y una actitud permanente en la mayoría de los matrimonios, sobre todo cuando comienzan algunos problemas o dificultades, la primera solución que aparece es la separación, el argumento es, ¿para qué seguir juntos sino se entienden? Esto es impulsado constantemente por personas frustradas, por artistas de cine y televisión con programas exclusivos, de los medios masivos de comunicación, haciendo creer a la juventud que todo es descartable, que la convivencia matrimonial es imposible sostener en el tiempo. Eso es una mentira diabólica que ataca al matrimonio, y atenta contra la familia, porque así no se busca o considera otra opción para solucionar dicha situación, sino que lo presentan como única opción.

Cuando un grupo de fariseos preguntaron a Jesús ¿Es lícito al hombre repudiar a su mujer por cualquier causa? Jesús respondiendo dijo;  ¿No habéis leído que el que los hizo al principio, varón y hembra los hizo, y dijo: Por esto el hombre dejará padre y madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne? Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre. Le dijeron: ¿Por qué, pues, mandó Moisés dar carta de divorcio, y repudiarla? Él les dijo: Por la dureza de vuestro corazón Moisés les permitió repudiar a vuestras mujeres; más al principio no fue así. Y yo les digo que cualquiera que repudia a su mujer, salvo por causa de fornicación, y se casa con otra, adultera; y el que se casa con la repudiada, adultera. Mateo 19:3-9. Esto debe llevar a los matrimonios a replantearse en los momentos de dificultad para entenderse, y buscar ayuda espiritual para solucionar esos problemas que buscan separarlos.

Dios como el creador del matrimonio aborrece la infidelidad matrimonial, esto dicen las Sagradas Escrituras; Pero ustedes aún hacen más: inundan de lágrimas el altar del Señor, y lloran con grandes lamentos porque el Señor ya no acepta con gusto sus ofrendas. ¿Y aún preguntan ustedes por qué? Pues porque el Señor es testigo de que tú has faltado a la promesa que le hiciste a la mujer con quien te casaste cuando eras joven. ¡Era tu compañera, y tú le prometiste fidelidad! ¿Acaso no es un mismo Dios el que ha hecho el cuerpo y el espíritu? ¿Y qué requiere ese Dios sino descendientes que le sean consagrados? ¡Cuiden ustedes, pues, de su propio espíritu, y no falten a la promesa que le hicieron a la esposa de su juventud! El Señor Dios de Israel, el todopoderoso, dice: ¡Cuiden, pues, de su propio espíritu, y no sean infieles; pues yo aborrezco al que se divorcia de su esposa y se mancha cometiendo esa maldad! Malaquías 2:14. Es cierto que esto no siempre es aceptado por la mayoría de las personas, creyendo que esto es religión y no se dan cuenta que son principios de vida establecida por Dios, para el buen funcionamiento en las relaciones familiares.

¿Por qué ayuda espiritual? Porque siempre los problemas matrimoniales y familiares, tienen un origen espiritual que se manifiesta en lo físico. Surgen por causas económicas, comportamientos y actitudes equivocadas, o influencias de terceros, y todo eso es parte de un plan diabólico para destruir o dañar lo que Dios estableció, por lo tanto solamente acudiendo a Dios, se puede tener la sabiduría de cómo resolver o tratar con el tema que preocupa o interfiere en la buena relación entre marido y mujer sin atacarse el uno al otro. Recordando que en Cristo, todo tiene solución, si realmente se quiere solucionar.

El matrimonio debe ser lo más saludable posible para que perdure en el tiempo, porque es en la familia donde se forjan el carácter de las personas que integran la sociedad, en la cual desarrollan las actividades físicas, comerciales, culturales, emocionales, deportivas, recreativas y espirituales. Sin matrimonios responsables, las familias no serán perdurables, y la sociedad se irá deteriorando moralmente, conforme al deterioro de sus integrantes por causa de los problemas o dificultades que tengan como personas. Por  lo tanto, la sociedad en la cual se vive está limitada en dar solución a los problemas que surgen en el ámbito familiar. Por eso solamente con un consejero espiritual fundamentado en las Sagradas Escrituras y con la guía del Espíritu  Santo, se puede encontrar la ayuda necesaria para el entendimiento y comprensión en la relación de pareja.

Se puede hablar mucho del tema matrimonio y familia, pero si no se reconoce los principios establecidos por Dios su creador, difícilmente funcione al cien por cien. Pero si se toma en cuenta esto que está escrito en la biblia, todo puede cambiar. Esto dice; Estén sujetos los unos a los otros, por reverencia a Cristo. Las esposas deben estar sujetas a sus esposos como al Señor. Esposos, amen a sus esposas como Cristo amó a la iglesia y dio su vida por ella. Efesios 5:21. Estando estos componentes en la voluntad del matrimonio, sin duda van a ser felices, no exento de problemas, pero con la voluntad firme de solucionarlos con la ayuda de Dios, fortaleciendo el vínculo del amor  del uno por el otro. Y sin duda que ahí crecerán niños sanos y felices, que integrarán la sociedad en la cual se vive, aportando vida y conducta saludable a la misma, como así también conservando la continuidad del matrimonio y la familia original.

Los abraza en Cristo. P. Sosa.