Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y hallaréis descanso para vuestras almas, porque mi yugo es fácil y ligera mi carga. Mateo 11:28
Han pasado ya varios meses de este año en el cual estamos, y seguramente usted, como persona se siente agotada, cansada de toda esta situación de inseguridad que se vive. Cansada de todo la problemática que hay en el país y el mundo, y a cada momento los noticieros nos recuerdan, mostrándonos imágenes catastróficas en algún punto del país y de la tierra. Imágenes de guerras, inundaciones, terremotos, volcanes, violencia social, muerte, hambre, enfermedad, accidentes, dictadores sometiendo a pueblos enteros, migrantes huyendo en busca de una mejor vida, etc.
También hay que sumar a todo esto la contaminación ambiental, aire, tierra y mar. Y no podemos olvidar la injusticia y corrupción que afecta a la clase política, los gobiernos, la salud, los sindicatos, las obras sociales, la justicia, las fuerzas del orden, y las religiones que tampoco escapan a este sistema.
Quizás algunas de estas cosas le han tocado de cerca, afectándolos de alguna manera. Como podemos ver el panorama es desalentador, trae dolor, angustia, tristeza, inseguridad, desaliento y miedos. Si nos detenemos a mirar solamente lo físico y material, humanamente no tiene solución, nadie encuentra la salida a toda esta situación. No hay gobiernos ni instituciones que puedan solucionar esto. Con todo este panorama, tal vez usted esté pensando en unas vacaciones, y así despejarse un poco de todo esto.
Pero, ¡No todo está perdido! ¡HAY ESPERANZA DE CAMBIO! No en el mundo, ni en la sociedad. Sin embargo, cada persona que quiera salir de esta situación que afecta el mundo entero, puede hacerlo. ¿Cómo, dirá usted? Es sencillo, pero no fácil, porque tiene que ver con la voluntad y decisión de cada persona, y no muchos están dispuestos a asumir esa responsabilidad.
Es difícil ir contra la corriente de este mundo, pero el que está dispuesto a hacerlo, recibe ayuda de lo alto. A eso se refiere Jesús cuando dice; vengan a mí, todos los que están cansados de luchar sin obtener un resultado satisfactorio en sus vidas, y encontraran descanso para sus almas. En Cristo está el verdadero descanso, es más seguro, y más económico que unas costosas vacaciones.
Los abraza en Cristo. P. Sosa
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