martes, 29 de octubre de 2019

Propósito de Dios para el hombre en la tierra.



Dios, el Señor, tomó al hombre y lo puso en el jardín de Edén para que lo cultivara y lo cuidara. 
Y le dio esta orden: Puedes comer del fruto de todos los árboles que hay en el jardín, excepto del árbol del bien y del mal. No comas del fruto de ese árbol, porque el día en que comas de él, morirás.
Luego Dios, el Señor, se dijo:
No es conveniente que el hombre esté solo; voy, pues, a hacerle una ayuda adecuada.
Entonces Dios, el Señor, trajo todos los animales terrestres y todas las aves del cielo, y se los llevó al hombre para que les pusiera nombre, porque todos los seres vivos llevarían el nombre que él les pusiera. El hombre puso nombre a todos los animales domésticos, a todas las aves y a todos los animales salvajes. Sin embargo, no encontró entre ellos la ayuda adecuada para sí.  Entonces Dios, el Señor, hizo caer al hombre en un profundo sueño y, mientras dormía, le sacó una de sus costillas y rellenó con carne el hueco dejado. De la costilla que le había sacado al hombre, Dios, el Señor, formó una mujer, y se la presentó al hombre que, al verla, exclamó: ¡Esta sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne!
Se llamará varona, porque del varón fue sacada.
Por eso el hombre deja a su padre y a su madre, se une a su mujer y los dos se hacen uno solo.
Los dos, el hombre y su mujer, estaban desnudos, pero no sentían vergüenza de verse así.
Dios es el autor del matrimonio y la familia, debemos cuidarla, es para  nuestro bien y debemos fortalecernos cada día en Dios nuestro creador.

lunes, 28 de octubre de 2019

¿Perder para ganar?




Jesús dijo: El que trate de salvar su vida, la perderá, pero el que pierda su vida por causa mía, la salvará. Mateo 10:39
El Señor Jesús siempre nos lleva a reflexionar sobre temas importantes y necesarios que hacen a una vida espiritual práctica.
Pensemos en esta frase que más parece contradictoria, que práctica.
A usted le debe pasar lo mismo, se estará preguntando, ¿Cómo es esto que si trato de salvarla, la pierdo, y si la pierdo la salvo? ¿Qué quiso decir nuestro Señor?
Cuando se trata de la vida, todos creemos saber cómo vivir y qué hacer con ella, sin embargo no siempre nos va bien. ¿Por qué?
Sencillamente porque hay cosas que gustan, pero que terminan dañando la salud física, la moralidad, el afecto, los sentimientos y la parte espiritual de cada persona. Es por eso que el apóstol Pablo escribió; todo me es lícito, pero no todo me conviene. Todo me es lícito, pero no todo me edifica.
Necesitamos aprender a diferenciar entre lo que me gusta y lo que me conviene, porque en la mayoría de las veces lo que me gusta resulta nocivo para mi vida.
Por ejemplo muchas veces hay excesos en el consumo de alcohol, en las comidas, en la diversión, en el trabajo, en el ocio, en el deporte, etc. ¿Por qué?  Porque nos gusta esas cosas.
Que no está mal pero en su justa medida, es por eso que Jesús quiere enseñarnos a ser equilibrados en todo esto. Por sobre todo darle importancia a lo que realmente importa, que no siempre es lo material. Hay veces que un hijo necesita que se le preste mayor atención antes que un juguete o una ropa nueva. Los esposos necesitan dialogar más antes que culparse unos a otros por los problemas familiares. Cada persona necesita más que bienestar material, necesita bienestar espiritual.
Es aquí donde toma mayor fuerza la frase de Jesús, hay que “perder la vida” poniéndola en las manos del Señor, para ganar vida plena viviendo de acuerdo al diseño divino que Dios estableció para el ser humano. Donde voluntariamente la persona renuncia a sus propios deseos egoístas, para hacer lo que Dios desea que se haga, que siempre será mejor.
Ahora bien es fácil decir todo esto, lo difícil es vivir esto en nuestras propias fuerzas.
Pero si se le entrega la vida a Cristo, su Santo Espíritu viene a vivir en la persona para darle fuerza y sabiduría para vivir de esa manera. Dando la verdadera perspectiva de lo que es vivir bien aún en medio de las dificultades que surjan.
“Perdiendo” la vida por amor a Jesús, es la mayor “ganancia” que podemos disfrutar.

viernes, 25 de octubre de 2019

¡Así comenzó!


Es bueno conocer el relato Bíblico de la creación del ser humano.
Cuando Dios, el Señor, hizo la tierra y el cielo no había aún arbustos en la tierra ni la hierba había brotado, porque Dios, el Señor, todavía no había hecho llover sobre la tierra ni existía nadie que cultivase el suelo; sin embargo, de la propia tierra brotaba un manantial que regaba toda la superficie del suelo. 
 Entonces Dios, el Señor, modeló al hombre de arcilla del suelo, sopló en su nariz aliento de vida y el hombre se convirtió en un ser viviente.
Dios, el Señor, plantó un jardín en Edén, al oriente, y puso allí al hombre que había modelado. Dios, el Señor, hizo brotar del suelo toda clase de árboles hermosos de ver y de frutos apetitosos. Además, hizo crecer el árbol de la vida en medio del jardín, y el árbol del conocimiento del bien y del mal.
Así comenzó nuestra historia en la tierra, este maravilloso lugar donde vivimos y que debemos cuidarlo.

jueves, 24 de octubre de 2019

Hay que hacerlo



Ayudar al prójimo es también, 
enseñarle a trabajar 
y cómo administrar lo ganado, 
así siempre tendrá.
P. Sosa 


martes, 22 de octubre de 2019

Proverbio Bíblico


Hijo mío, conserva el buen juicio;
    no pierdas de vista la discreción.
Te serán fuente de vida,
    te adornarán como un collar.
Podrás recorrer tranquilo tu camino,
    y tus pies no tropezarán.
Al acostarte, no tendrás temor alguno;
    te acostarás y dormirás tranquilo.
No temerás ningún desastre repentino,
    ni la desgracia que sobreviene a los impíos.
Porque el Señor estará siempre a tu lado
    
y te librará de caer en la trampa.


jueves, 17 de octubre de 2019

¡MADRE!



Madre, fuiste el instrumento en manos de Dios,
Él te ha escogido para bendecirte,
Junto con el hombre al cual te has unido,
Dándote la gracia de ser coheredera,
Gestando en tu vientre una nueva vida,
Privilegio hermoso de cada mujer,
Llevar en su vientre otro ser humano,
Él usó tu cuerpo para traer al mundo,
Otro ser humano que necesitaba,
Para alcanzar a otros con su gran amor.
P. Sosa

¡¡¡MUJER!!!


Mujer, ¿has pensado lo valiosa que eres?
En el plan perfecto que Dios diseñó,
Él constituyó, cuando nada había,
La vida en familia para continuar,
Formó el matrimonio, estado perfecto,
De varón y hembra lo constituyó,
Un padre, una madre, ¡Vaya privilegio!
Procreando vida, ¡disfrutar de a dos!
Llegarán los hijos, ¡Qué felicidad!
Desde ese momento tú eres ¡Mamá!
P. Sosa

martes, 15 de octubre de 2019

Amadas mujeres.




Que el adorno de ustedes no sea de cosas externas, como peinados exagerados, o con joyas de oro y vestidos lujosos. La belleza no depende de las apariencias, sino de lo que hay en el corazón. Así que, sean ustedes personas tranquilas y amables. Esta belleza nunca desaparece, y es muy valiosa delante de Dios.
Esas cosas son las que embellecen a las mujeres. Bendiciones

jueves, 10 de octubre de 2019

¡Poderoso!


¡¡¡INOLVIDABLE!!!



Nunca olvido aquel momento,
En que tú viniste a mí,
Y vi en tu tierna mirada,
El amor profundo y santo,
Tu compasión, tu ternura,
Que en tus brazos recibí.

Jesús, mi amado Jesús,
Cuando te invité a mi vida,
Entraste para quedarte,
Perdonaste mi pecado,
Sanaste mi alma herida,
Y me enseñaste a vivir.

Mientras, espero tu regreso,
Se ensancha mi alma de gozo,
Sabiendo que por mi vienes,
Para llevarme a tu reino,
Junto con los redimidos,
A vivir eternamente.

Salmos


miércoles, 2 de octubre de 2019

Salmo para orar


Dios mío,
enséñame a cumplir tus mandamientos,
pues obedecerlos me hace feliz;
¡los cumpliré toda mi vida!
Aclara mi entendimiento,
y los seguiré de todo corazón.
Hazme pensar sólo en tu palabra,
y no en las ganancias egoístas.
No me dejes seguir a dioses falsos,
pues quiero adorarte sólo a ti.
¡Cumple tu promesa y dame ánimo!
Lo que más deseo es tu palabra.
Me asusta pensar
que mis enemigos me desprecien.
Ponme a salvo y dame ánimo,
pues tú eres un juez justo.