viernes, 28 de diciembre de 2018

Iglesia de Cristo


 

Nos guste o no, entendamos o no, aceptemos o no, reconozcamos o no, LA IGLESIA DE CRISTO ES UN CUERPO.
El cuerpo de nuestro Señor Jesucristo en la tierra, donde él es la cabeza.
Pero este cuerpo no está reducido a una congregación, sino que es la iglesia en la ciudad, formada por distintas congregaciones, bajo distintas denominaciones, con distintos ministerios, distribuida alrededor del mundo, desde el comienzo mismo de la iglesia.
La unidad se da en el cuerpo, no por decisión humana, sino por la voluntad de Dios Padre.
Recordemos que Cristo viene por su iglesia, no por los religiosos.
Hay quienes están en las congregaciones, pero eso no lo hace parte del cuerpo ni suman para la unidad.
Los que somos miembros del cuerpo y reconocemos la unidad, somos todos los lavados en la Sangre del Cordero y nuestro nombre figuran en el Libro de la Vida.
El Espíritu Santo da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios, por lo tanto hermanos y miembros del mismo cuerpo.
El amor de Dios derramado en nuestros corazones, nos lleva a mantener la unidad en el vínculo de la paz.
El reconocimiento del cuerpo se da en el Espíritu y se manifiesta en lo físico.

lunes, 24 de diciembre de 2018

NAVIDAD



Es tiempo que pensemos en la navidad.
Dice La Biblia; María dará a luz un hijo, y llamará su nombre JESÚS, porque el salvará a su pueblo de sus pecados.  Mateo 1:21
El nacimiento virginal de Cristo, marca el comienzo de la era de la gracia de Dios hacia el ser humano. La cual continúa con el sacrificio de Cristo en la cruz del Calvario, su muerte y resurrección, su ascensión a los cielos, y culmina con la segunda venida de Cristo a buscar a su iglesia.
Ahora bien, para entender y celebrar correctamente el nacimiento de Jesús, debemos mirar el calvario y a Cristo crucificado allí.
Así comprenderemos que Jesús nació como un niño en Belén, para morir por mí, por ti, por la humanidad, para que podamos ser perdonados de nuestros pecados.
Entendiendo esto, toma verdadero significado el nacimiento del Niño Jesús, ese nacimiento sobrenatural ocurrido hace más de dos mil años, pero con plena vigencia hoy.
Ese niño que nace en Belén de Judea, es el mismo que a sus treinta y tres años de vida, es crucificado en Jerusalén. Fue crucificado porque, Él es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.
Por eso en esta Navidad cada uno se debe preguntar cuando esté celebrando.
Jesús, ¿es mí Salvador?
No nos quedemos solamente contemplando el pesebre, elevemos nuestra mirada al calvario y allí veremos a este Jesús, Poderoso Salvador, resucitando de entre los muertos al tercer día, cancelando toda deuda que había en contra nuestra desde el infierno que nos esperaba para recibirnos.
Pero por la obra maravillosa de Dios a través de Cristo, hizo posible que todo aquel que cree en Cristo y le entrega su vida a él, recibe perdón de pecados y la vida eterna en el reino de Dios.
¡¡¡Inigualable amor de Dios por la humanidad!!!

viernes, 14 de diciembre de 2018

Amor incondicional



Nunca olvido aquel momento,
En que tú viniste a mí,
Y vi en tu tierna mirada,
El amor profundo y santo,
Tu compasión, tu ternura,
Que en tus brazos recibí.

Jesús, mi amado Jesús,
Cuando te invité a mi vida,
Entraste para quedarte,
Perdonaste mi pecado,
Sanaste mi alma herida,
Y me enseñaste a vivir.

Mientras, espero tu regreso,
Se ensancha mi alma de gozo,
Sabiendo que por mi vienes,
Para llevarme a tu reino,
Junto con los redimidos,
A vivir eternamente.

domingo, 2 de diciembre de 2018

Sin Cristo no hay Navidad


Si Cristo no hubiera venido
Navidad no existiría
El pesebre no estaría
Y nada que celebrar
Nadie podría decir
Tenga Feliz Navidad.

Si Cristo no hubiera venido
No habría qué festejar
Ni alegría ni esperanza
Ni la mesa navideña
Ni la reunión en familia
Ni el regalo  a los niños.

Si Cristo no hubiera venido
No hay razón de vivir
No habría tregua ni paz
En medio de tantas guerras
De venganzas y de odios
Que destruyen nuestra tierra.

Pero ¡Cristo ha nacido!
Él es la esperanza viva
Es el amor encarnado
Vino trayendo la paz
A un mundo necesitado
De Dios, su Buena Voluntad.